Así es el billete único de transporte alemán en el que se inspirará el Gobierno para implantarlo en España en 2026

“Vivimos una transición que nos tiene que conducir a implantar en 2026 un billete único en España, algo que ya tiene Alemania”, anunció el pasado jueves el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente.

Así, en mayo de 2023 en Alemania se implantó el 'Deutschland-Ticket' (D-Ticket), un billete de transporte público único que permite viajar de forma ilimitada en metro, bus, tranvía y tren. Inicialmente su precio fue de 49 euros al mes, aunque a partir del 1 de enero de 2025 se ha incrementado a 58 euros. 

Alberto Ortega Europa Press

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Prácticamente un usuario puede moverse por todo el país a este precio, excepto en trenes operados por DB Fernverkehr (filial de larga distancia de la empresa ferroviaria estatal Deutsche Bahn) u otras compañías de larga distancia como FlixTrain. 

No obstante, DB Fernverkehr está negociando actualmente con los estados federados y las autoridades de transporte locales sobre excepciones en determinados tramos de la ruta, según detalla en su web Deutsche Bahn (la empresa que gestiona este billete).

Trenes de DB Fernverkehr.

Este abono único sustituyó a los billetes de 9 euros que introdujo el Gobierno germano durante los meses de verano de 2022 con el fin de paliar los efectos de la inflación provocados por la guerra en Ucrania. 

Esto recuerda mucho a lo ocurrido en España, con la diferencia de que en nuestro país se ha subvencionado el transporte público durante más de dos años. 

Austria, Portugal...

Pero el billete alemán no es único. Parte de Europa centra su estrategia en potenciar los modos de transporte sostenibles. De ahí que busquen incentivos para atraer a viajeros. En este sentido, Austria lleva la delantera.

En octubre de 2021, puso en marcha el 'KlimaTicket', un billete único con un precio anual de 1.095 euros (91,25 euros al mes o tres euros al día) y 821 euros para los jóvenes. Precio que se ha mantenido fijo hasta el 1 de enero de 2025, que ha aumentado a 1.179 euros y 884,2 para jóvenes. 

KlimaTicket.

Una subida que se debe “al cambio en el IPC y a los crecientes costes de las empresas de transporte implicadas”, detallan desde el proveedor del abono. 

Este billete es válido para viajar en trenes de la empresa pública ÖBB, de WESTbahn y todos los transportes públicos locales de Austria, aunque no es válido para rutas de larga distancia ni otros operadores. Además, como novedad a partir del 1 de julio de 2024 los jóvenes de 18 años reciben el billete gratis (algo que sólo se puede solicitar una vez). 

Y más cerca de España tenemos el caso de Portugal, que lanzó hace unos meses un nuevo billete de tren mensual de 20 euros denominado 'Green Rail Pass'. El pase permite a los pasajeros viajar en casi todos los servicios urbanos, regionales, interregionales e interurbanos operados por la empresa ferroviaria estatal Comboios de Portugal (CP).

Aunque en este caso, las restricciones de uso son mayores: los trenes Alfa Pendular de alta velocidad de CP no están incluidos y no es válido en otras formas de transporte público como metros o tren ligero.

Tren de Comboios de Portugal (CP).

El billete único cuesta bastante menos que el anterior. El 'National Rail Pass' tenía un precio de 49 euros y se introdujo en agosto de 2023 (también inspirado en el modelo alemán). 

Ese mismo año, Hungría también introdujo dos abonos en el transporte. Una tarjeta de viaje nacional con un coste de 49 euros que da permiso a usar todas las líneas de autobús y tren operadas por las compañías ferroviarias MÁV-START, MÁV-HÉV y GYSEV, así como los servicios de autobuses Volánbusz. La otra tarjeta es una regional que cuesta 25 euros. En ambos casos, los estudiantes tienen un 90% de descuento. 

Pero hay un país que ha ido más allá incluso. Desde el 29 de febrero de 2020, en Luxemburgo todos los transportes públicos son gratuitos, tanto para residentes como para turistas. Se trata de una medida que tomó el Gobierno para reducir el tráfico. 

En todos estos casos, el principal beneficio es un transporte público más accesible a la población y la disminución de la contaminación. Por contra, esta reducción de tarifas supone un elevado coste a los estados que sufragan estas iniciativas. En Luxemburgo, por ejemplo, el déficit lo cubren sobre todo los contribuyentes con impuestos más altos.

Sistema español actual

Con estos ejemplos, Transportes lleva meses trabajando en una fórmula asequible a todos los bolsillos. Y ya cuenta con un calendario establecido. “Este año va a ser de transición. Una primera parte contará con bonificaciones y en una segunda vamos a un modelo de transición que nos conduce a 2026 con un billete único como tiene Alemania”, señaló Puente. 

Eso quiere decir que durante el primer semestre continúan los descuentos de hasta el 100% del transporte público terrestre para viajeros. Así, se mantienen los abonos gratuitos de Cercanías, Rodalies, Media Distancia Convencional y de las líneas de autobús estatal, así como la rebaja del 50% de los abonos Avant, entre otras medidas.

Imagen de archivo de un tren de Cercanías.

A partir del 1 de julio, el Gobierno contempla crear un billete único de Cercanías para todas las zonas y núcleos de España por 20 euros al mes, la gratuidad de todo el transporte público colectivo para menores de 15 años, descuentos de entre el 50% y el 70% en los abonos para jóvenes, tarifas más reducidas para usuarios recurrentes y nuevas ayudas para promover el uso de la bicicleta.

Y ya en 2026, ese billete único podría incluir otros medios de transporte y tener otro precio como hemos visto que ocurre en Europa. Pero para conocer estos detalles habrá que esperar un poco más.