Los últimos datos publicados por el Ministerio de Sanidad sobre la evolución de la pandemia en nuestro país muestran un repunte de los contagios por Covid-19. A una semana para que comiencen las fiestas navideñas, la incidencia acumulada es de 198 casos por cada 100.000 habitantes en los últimos 14 días.
El presidente de la Sociedad Española de Medicina Preventiva, Salud Pública e Higiene (Sempsph), Rafael Ortí, ha explicado a Invertia que la segunda ola “parecía que estaba disminuyendo y hacía indicar que podríamos llegar a final de año con una incidencia acumulada de 50 casos por cada 100.000 habitantes, un dato aceptable”.
Sin embargo, España está registrando un aumento que “es seguramente el reflejo de los días de compra, en concreto la semana del Black Friday”. Una réplica de la segunda ola “que puede verse reforzada por el puente de la pasada semana”.
El repunte de contagios, que este martes se incrementaron en 10.328, deja claro que “la Administración pública no aprende y sigue sin reforzar los servicios de salud pública”, ha añadido.
Para Ortí es necesario endurecer las medidas “porque parece que no aprendemos de otra manera”. De hecho, en el caso de que la situación se descontrole y los casos continúen creciendo, el Gobierno no descarta endurecer las restricciones antes de que comiencen las fiestas navideñas.
Alemania como ejemplo
En Europa, son varios países los que han decidido incrementar las restricciones para controlar la segunda ola de la Covid-19 y evitar el inicio de una tercera. Entre ellos, Alemania.
El presidente de la sociedad científica pone de ejemplo la contundencia de Angela Merkel, canciller alemana, en la adopción de nuevas medidas para tratar de frenar la propagación del coronavirus. Desde el pasado 16 de noviembre y hasta el 10 de enero, el país ha decretado un “confinamiento duro”. Solo podrán abrir los comercios esenciales y los colegios también han cerrado sus puertas.
En el caso de Alemania, su Gobierno “cumple con la proyección de aplicación de las restricciones”. Sin embargo, en España “cuando parece que todo va bien, las autoridades se confían. Ese exceso de confianza nos lleva a tener más muertes e ingresos hospitalarios y no es ético”.
Por ello, Ortí aboga por “endurecer las restricciones porque parece que es la única forma de aprender”. En este sentido, avisa de que “no es aceptable que se junten amigos, porque esto nos llevará a tener una situación como la del final del verano. Nos enfrentaremos a una tercera ola”.
Y no tiene tan claro que hayamos aprendido la lección en el pasado: “La población de nuestro país está repitiendo el mismo patrón de comportamiento que hace 100 años con la epidemia de la gripe española”.