Las autoridades de Rusia han movido ficha para producir su vacuna contra la Covid-19, Sputnik V, en la Unión Europea. Según ha publicado el diario Die Welt, el país presidido por Vladímir Putin ha consultado a la empresa farmacéutica alemana IDT Biologika acerca de la fabricación de su antígeno en sus instalaciones.
El propio ministro de Salud germano, Jens Spahn, ha confirmado que existen consideraciones sobre la producción de Sputnik V en Europa. Según Moscú, Rusia solicitó en enero la aprobación del fármaco a la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) para su uso en la lucha contra la pandemia.
"Podemos proporcionar apoyo para la producción de una vacuna que aún no ha sido aprobada en Europa", ha matizado, recalcando su "entusiasmo" con cualquier fármaco contra la enfermedad que muestre efectividad, sea seguro y pueda "marcar la diferencia". "Hasta qué punto este es el caso con Sputnik V lo tendrá que determinar la agencia reguladora", ha añadido.
La canciller alemana, Angela Merkel, se mostró el martes favorable a la administración de la Sputnik V, desarrollada por el Instituto Gamaleya en Moscú. "Todos (los fármacos) que reciben la aprobación de la EMA son bienvenidos", dijo.
Además, ya se ha mostrado dispuesta a colaborar con el presidente ruso, Vladimir Putin, en el marco de la producción y uso de la vacuna a pesar de las "diferencias políticas" entre ambos.
A finales de enero, las autoridades rusas señalaron su disposición a entregar a la Unión Europea 100 millones de dosis de la vacuna durante el segundo trimestre del año, aunque resaltaron que la entrega estaría sujeta a la aprobación de la EMA. La revista 'The Lancet' ha revelado que la efectividad de la vacuna es del 91,6%.