La farmacéutica Moderna ya ha completado el desarrollo del candidato a vacuna contra la variante sudafricana de la Covid-19 y ha enviado el material a las autoridades competentes para iniciar el ensayo clínico. La rápida actualización de este antígeno se debe a la plataforma de ARNm utilizada, que permite mayor flexibilidad a la hora de adaptarlo para hacer frente a nuevas cepas del virus.
En un comunicado, la compañía explica que ha diseñado estrategias para hacer frente a las variantes del coronavirus. Así, evaluará los efectos de la dosis de refuerzo, una combinación de la dosis de refuerzo con la vacuna original, y una tercera dosis de la vacuna que ya está en el mercado.
“Moderna se compromete a realizar todas las actualizaciones de nuestra vacuna que sean necesarias hasta que la pandemia esté controlada. Esperamos demostrar que las dosis de refuerzo, si fueran necesarias, pueden realizarse a niveles de dosis más bajos, lo que nos permitirá proporcionar muchas más dosis a la población mundial a finales de 2021 y 2022 si fuera necesario”, ha explicado Stéphane Bancel, director ejecutivo de la farmacéutica.
Capacidad de producción
Además de completar el desarrollo de su nueva vacuna contra la cepa sudafricana, Moderna también ha anunciado inversiones adicionales para aumentar la capacidad de fabricación mundial de su antígeno contra la Covid-19.
Así, la capacidad proyectada para 2022 de la compañía ha aumentado a 1.400 millones de dosis. En lo relativo a 2021, Moderna está trabajando para suministrar hasta 1.000 millones.
Además, la agencia del medicamento de Estados Unidos ha respaldado la propuesta de la compañía para añadir más dosis a cada vial de la vacuna. El objetivo es extraer hasta 15 dosis de cada vial.