Aunque sigue participando de forma esporádica en actos públicos, está claro que Fernando Simón ha dejado de ser la cara visible del Gobierno en lo relacionado con la pandemia. La última rueda de prensa para informar sobre la evolución de la Covid en la que participó fue en julio. ¿Por qué la cara más conocida del Ejecutivo en cuestiones relacionadas con la pandemia ha pasado a un segundo plano, sobre todo teniendo en cuenta la explosión de casos por la variante ómicron? Según fuentes cercanas a Simón, porque él mismo lo habría pedido.
El director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CAES) del Ministerio de Sanidad, según estas fuentes, ha acusado el importante desgaste sufrido en las olas de Covid en 2020, y en la primera mitad de 2021, y habría solicitado un descanso de sus labores más 'mediáticas'. Una situación que, salvo cambio de opinión, se mantendrá a pesar del estallido de la variante ómicron.
Un esfuerzo y sobreexposición pública que le habría pasado factura tanto a él como a su familia, indican las voces consultadas, que destacan los ataques que la figura de Simón ha recibido a cuenta de la gestión de la pandemia por parte del Ejecutivo, fuera cual fuera el ámbito del que se tratara, aunque no fuera sanitario.
En este sentido, cabe recordar que Simón es un técnico, es decir, que no tiene perfil político. Dirige el CAES desde 2012. Es decir, que le puso en el cargo Ana Mato, por entonces ministra de Sanidad del Partido Popular, y ha tenido que lidiar con crisis sanitarias como la del ébola, en 2014.
A pesar de ello, ha sido objeto de ataque por parte de la oposición política al Gobierno, incluido el propio PP. Pablo Casado, su presidente, llegó a pedir su cese por "incompetencia, politización y falsedades".
Vida pública
Aunque su desaparición de las ruedas de prensa sobre los datos de la Covid es constatable, eso no significa que haya abandonado la vida pública. De hecho, participó hace dos semanas en la presentación de un informe conjunto de Médicos del Mundo y Medicusmundi. En esta intervención, valoró que la tercera dosis de la vacuna contra la Covid puede no ser necesaria en toda la población y animó a la vacunación infantil.
Además, ha seguido participando en las reuniones con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, del Comité de Seguimiento del Coronavirus. Desde el Ministerio de Sanidad recuerdan que la actividad pública de Simón se mantiene, aunque no dan pistas ni valoran el 'paso atrás' mediático del director del CAES.
El testigo ha sido tomado, en el campo técnico, por Silvia Calzón, secretaria de Estado de Sanidad, que sí tiene perfil político, a diferencia de Simón, al haber sido concejala y parlamentaria por el PSOE en Andalucía.
Su última comparecencia pública fue el pasado día 14 de diciembre, justo en los inicios de la eclosión de los contagios por la variante ómicron.
Aunque Calzón no ha vuelvo a comparecer para informar sobre la situación desde entonces (sí lo hizo Carolina Darias, tras el Consejo de Ministros extraordinario del pasado 23), desde Sanidad aseguran que no se ha generado ningún 'hueco' informativo de cara a la población y que todo el personal del departamento sigue trabajando por paliar la pandemia.