Atrys Health inaugura una nueva etapa tras su estreno en el Mercado Continuo. El toque de campana celebrado este lunes ha supuesto para la empresa culminar un recorrido que empezó con su salida a BME Growth en 2016. Ahora, se inicia una siguiente fase con el objetivo de seguir creciendo orgánica e inorgánicamente en el sector salud para, “en pocos años”, premiar a sus accionistas con el reparto de dividendos.
Así lo explica la consejera delegada de la compañía, Isabel Lozano, en una entrevista con EL ESPAÑOL-Invertia. En la cotizada estrenan año por todo lo alto y con la vista puesta en el PERTE ‘Salud de Vanguardia’. “Sin duda alguna, queremos estar. Estamos analizando de qué manera podemos contribuir”.
“Tenemos una capacidad que muy pocas compañías privadas tienen hoy por hoy en España. Estamos operando en siete países, somos líderes en lengua española y en telediagnóstico. Tenemos una experiencia que aportar al PERTE”, añade Lozano.
Uno de los pilares de Atrys Health es la medicina de precisión. Un área para la que el proyecto estratégico prevé una inversión pública de 81,5 millones de euros. “Una cantidad respetable con la que podremos hacer grandes cosas”, valora la CEO.
Pero hará falta más. “Lo ideal es que esta inversión fuera sostenida en el tiempo si lo que aspiramos es que a que la medicina de precisión sea una herramienta para conseguir una salud más sostenible, un estado general de la población mejor tratado y diagnosticado a tiempo”.
Líneas de investigación
Atrys “es pionera” en varias líneas de investigación. En concreto, en biopsia líquida, donde llevan mucho tiempo trabajando. “Nuestro objetivo es seguir ampliando esta línea a diferentes tipos tumorales”.
También en oncología radioterápica, “para que sea más concentrada en el tiempo, con menos efectos secundarios y con mejores ratios riesgo-beneficio para el paciente”, continúa Lozano.
Y desde la firma se apuesta fuerte por la automatización diagnóstica. “Tenemos un equipo dedicado a la inteligencia artificial que nos ayuda a mejorar esta área. De tal manera, que nuestros especialistas se dediquen a aquellos casos en los que realmente haya dudas y que requieran de atención médica pormenorizada”, dice Lozano.
Unas áreas de trabajo que pueden ampliarse este año. “Tenemos un pipeline de posibles compañías que pueden entrar a enriquecer nuestra cartera de servicios. El objetivo es transformarlo en adquisiciones a lo largo de 2022”.
Es decir, con hasta una decena de posibles operaciones en el radar, el objetivo es continuar por la senda de 2021, en el que cerró adquisiciones corporativas como la de Aspy, especializada en la prevención de riesgos laborales. Además, se cerraron las compras del grupo portugués de oncología Lenitudes, del suizo Radio-Onkologie Amsler, de la especialista en diagnóstico en medicina nuclear SIMM y de la empresa de genética Genetyca ICM.
“Con la opa sobre Aspy entramos de lleno en el sector de la prevención. De alguna manera queremos empezar a prestar servicios de salud desde la prevención, desde el diagnóstico temprano, para que esto nos lleve a las últimas fases de nuestra actividad que son, por ejemplo, los tratamientos oncológicos”, indica la CEO.
Ampliar la base accionarial
La importancia de salir al mercado continuo es también “tener acceso a operaciones de más dimensión y a inversores de otro tipo, incluyendo internacionales. El objetivo es ampliar nuestra base accionarial y potenciar las adquisiciones”.
Y ya tienen pretendientes, según deja entrever Lozano. “Tenemos cada vez más visibilidad y hay más inversores de todo tipo que nos están llamando. Sin ir más lejos, el fondo soberano noruego ha tomado una participación en Atrys y no es el único gran fondo internacional”.
Actualmente, Excelsior Times, el holding del expresidente de Aspy, es el accionista principal de Atrys, con un 30,3% del capital. “Tenemos magníficas relaciones con José Elías Navarro, como con el resto de accionistas. Nuestro accionariado está comprometido con la compañía, algo vital para potenciar el crecimiento al que aspiramos”.
Pero la base accionarial va más allá. Desde el grupo de capital riesgo Inveready (5,14%) al family office Onchena (6,21%) de la familia Ybarra Careaga. Pasando también por la gestora MCH, las firmas aseguradoras Caser y Mutua Madrileña y Global Investmente Portfolio, el brazo inversor de los Domínguez de Gor, la saga propietaria de la textil Mayoral.
“Lo importante de Atrys es que hemos conseguido crear una base accionarial que confía y cree en el proyecto que tenemos”, concluye Lozano al hacer balance del camino recorrido.
Ahora, por delante, una hoja de ruta exigente para cuyo éxito espera contar con la “mayor visibilidad” que aporta formar del Mercado Continuo. “Otra liga” a la que la compañía llega después de un rodaje de seis años en los que su expansión y decisiones de negocio se han traducido en una revalorización acumulada del 586%.