Este martes, el Consejo de Ministros ha aprobado el anteproyecto de Ley del Aborto, una norma en la que se ha incluido la baja laboral por regla dolorosa. Según diferentes estudios, la dismenorrea afecta al 80% de las mujeres. Un dolor asociado a la menstruación que tiene su impacto en el trabajo femenino.
En concreto, en la productividad, que disminuye en 23 días al año. Es uno de los resultados de una encuesta realizada a más de 32.000 mujeres de entre 15 y 45 años en Países Bajos. El estudio, publicado en la revista médica BJM Journals, indica que el 80,7% de las encuestadas aseguró que acudía al trabajo durante el período menstrual, pero que su productividad era menor.
Por otro lado, el 13,8% de las encuestadas aseguró haberse ausentado del trabajo debido a una regla dolorosa, mientras que el 3,4% lo ha hecho en todos o casi todos sus ciclos menstruales. En cuanto a la duración de la baja laboral por regla dolorosa, el estudio lo fija en poco más de un día al año.
Los dolores menstruales suelen acompañar al 80% de las mujeres.
Otro resultado que arroja este estudio publicado en 2019 es que solo el 20% de las mujeres encuestadas dijo la verdadera razón de su ausencia. Por su parte, el 46,4% mencionó únicamente el síntoma, el 27,7% no dio ninguna razón y el 5,8% se inventó el motivo.
La encuesta también incluía preguntas sobre cómo se podía mejorar el entorno laboral durante el ciclo menstrual. La mayoría de las mujeres indicaron la necesidad de tener más flexibilidad durante sus períodos, como la posibilidad de realizar menos trabajo físico (32,1%), trabajar desde casa (39,5%) o poder tener un día libre y recuperarlo más tarde (11,5%).
La baja laboral en España
Como se ha mencionado anteriormente, se cifra en un 80% las mujeres que sufren dismenorrea al menos una vez en la vida.
Teniendo en cuenta que en España hay alrededor de nueve millones de empleadas, la cifra de mujeres que podría beneficiarse de la nueva norma (excluyendo a aquellas que han tenido la menopausia) se elevaría a unos 6,2 millones de mujeres.
El único requisito para pedir la baja es que el dolor menstrual sea "incapacitante". Es decir, que existan dolores intensos, calambres, cólicos, náuseas, mareos y vómitos durante la menstruación, no una simple incomodidad.
Pero, será el médico quien decidirá finalmente si un dolor de regla es tan “incapacitante” como para cursar una baja laboral o no lo es. Según la literatura médica, ‘sólo’ un 15% de las mujeres que tienen dolor menstrual pueden llegar a tener dolores tan agudos como para faltar a su puesto de trabajo.
Sin pérdida económica
La norma incluye, además, la financiación pública de la incapacidad temporal generada por el dolor que puede provocar la regla. Es decir, que la trabajadora no tendrá que asumir la pérdida económica que supondría una baja corta, como sería la de este tipo, en caso de que un convenio colectivo no la cubra.
Respecto al impacto económico de esta medida, la ministra de Igualdad, Irene Montero, calcula que estará cerca de los 24 millones de euros, con cargo a la Seguridad Social.