La próxima convocatoria del Formación Sanitaria Especializada (FSE), que comprende a los médicos (MIR), enfermeros (EIR), farmacéuticos (FIR), psicólogos (PIR), etc., cuenta con 11.171 plazas. Una cifra que ha ido creciendo año tras año, aunque hay tres comunidades autónomas que destacan por ser las que más la han incrementado desde la convocatoria de 2015.
Se trata de Castilla-La Mancha, Baleares y Extremadura. Así se extrae del informe sobre la evolución de plazas desde la convocatoria 2014/2015 hasta la del próximo año que ha elaborado el Centro de Estudios del Sindicato Médico de Granada.
De acuerdo con este análisis, el primer lugar es para Castilla-La Mancha, con un incremento de plazas desde la convocatoria 2014-2015 del 137,63%. Le siguen las Islas Baleares, con un incremento del 95,28%, y Extremadura, con el 82,35%.
En los últimos puestos de la tabla están regiones como la Comunidad de Madrid, con el 21,11%, seguida de Cantabria con el 27,59%, Canarias con el 43,54% y la Comunidad Valenciana con el 44%.
El informe también analiza los incrementos en números absolutos. En este caso, Andalucía es la que ha aumentado el mayor número de plazas, con 697 plazas más que en la convocatoria 2014- 2015. A continuación, Cataluña (619), Comunidad Valenciana (319), Comunidad de Madrid (312), Castilla y León (306) y Castilla-La Mancha (267).
Titulaciones
A partir de la convocatoria 2015-2016 comienza un incremento de plazas en las diferentes titulaciones de Formación Sanitaria Especializada. Un crecimiento que fue lento en los primeros años, pero que en las últimas convocatorias se ha acelerado, sobre todo en la convocada para 2023.
En números absolutos, es Medicina la que tiene un mayor incremento con 2.594 plazas midiendo las plazas desde la convocatoria de 2015. Le siguen Enfermería (1.011), Psicología (104), Farmacia (88), Biología (30), Física (12) y Química (4).
[Así es el reparto de las 8.550 plazas MIR por especialidades para el próximo año 2023]
Sin embargo, en porcentaje, es Enfermería (106,42%) la que ha tenido un mayor incremento, seguida de Biología (100%), Psicología (81,89%), Medicina (53,55%), Farmacia (40%), Física (40%) y, en último lugar, Química (26,67%).
Si comparamos las diferencias desde la pasada convocatoria, en números absolutos es Medicina la que tiene un mayor incremento con 561 plazas seguida de Enfermería (278), Farmacia (41), Psicología (33), Biología (10) y Física (2). Química, por su parte, pierde dos vacantes. Sin embargo, en porcentaje es Biología (19,23%) la que ha tenido un mayor incremento, seguida de Enfermería (18,60%), Psicología (17,46%), Farmacia (14,86%), Medicina (7,37%), Física (5,26%), y Química que pierde plazas (-20%).
Plazas MIR insuficientes
La sanidad española se enfrenta a años complicados. Alrededor de 80.000 médicos se jubilarán en los próximos diez o doce años. Y lo peor de todo: no se podrán reponer. ¿Por qué? Porque son insuficientes los residentes que terminan en estos años.
Actualmente, hay unos 80.000 activos mayores de 55 años, que suponen el 33,8% de los médicos en activo, de acuerdo con la estimación que ha hecho el Centro de Estudios del Sindicato de Granada a partir de los datos ofrecidos por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Además, han tenido en cuenta que la inmensa mayoría de los médicos entre 55 y 64 años, y un porcentaje de los que tienen entre 65 y 69 que aún están en activo, se jubilarán en los próximos diez o doce años.
Para reponer este importante número de jubilaciones, son insuficientes los residentes que terminan en estos años, alerta el informe. Cabe recordar que formar a un médico especialista supone, como mínimo, un tiempo de once o doce años (seis de facultad, otro de preparación MIR y cuatro o cinco años de formación especializada).
En mayo de este año podían terminar como máximo 6.478; en 2023, el máximo posible es de 6.743; en 2024, el máximo posible es de 7.496; en el año 2025, el máximo es de 7.894; y en 2026, un máximo de 8.017.
Sin embargo, los que finalmente terminan cada año son menos, ya que hay un importante número de residentes que se marchan a sus países de origen (más de 1.000 en esta última convocatoria), o bien se marchan a países de nuestro entorno en los que les ofrecen mejores contratos, más estables, con mejores condiciones laborales y mucho mejor retribuidos.