La farmacéutica GSK está de celebración. Su centro de I+D en la localidad madrileña de Tres Cantos cumple 30 años. Unas instalaciones que la compañía tiene el objetivo de ampliar en un "futuro cercano". "El proyecto ya está aprobado", ha anunciado la presidenta de GSK España, Cristina Henríquez de Luna.
Por el momento se desconocen los detalles de este plan de ampliación de las instalaciones. Habrá novedades "en los próximos meses", ha añadido la presidenta de la farmacéutica.
Este proyecto pone de manifiesto la importancia de la I+D para GSK. Solo en España, la compañía ha invertido más de 260 millones de euros en investigación en los últimos cinco años. A nivel global, esta cifra asciende a 5.800 millones anuales.
Pero no son las únicas inversiones. Hace unos meses, GSK anunció que destinará más de 1.200 millones de euros durante los próximos diez años a la búsqueda de nuevos tratamientos y vacunas para hacer frente a las enfermedades infecciosas.
La investigación se centrará en vacunas y medicamentos nuevos y disruptivos para prevenir y tratar la malaria, la tuberculosis, el VIH (a través de ViiV Healthcare), las enfermedades tropicales desatendidas (NTD) y la resistencia a los antimicrobianos (RAM).
La planta de Tres Cantos
El centro de I+D de Tres Cantos se inauguró de manera oficial en el año 1992. Está focalizado en las “enfermedades olvidadas”, que hacen referencia al conjunto de enfermedades infecciosas que afectan principalmente a las poblaciones con las rentas más bajas y con un limitado acceso a los sistemas sanitarios.
Las instalaciones están estructuradas en unidades de investigación de fármacos, que operan de manera autosuficiente desde las fases de ensayo o screening hasta la prueba de concepto en fase II. Dos de estas unidades están dedicadas a malaria y tuberculosis, y una tercera a las enfermedades causadas por kinetoplástidos (Leishmaniasis, Chagas y la enfermedad del sueño), y están apoyadas por la unidad de Operaciones.
Esta planta también dio apoyo durante los meses más duros de la pandemia. "Se transformó para ayudar durante la crisis sanitaria", ha explicado Henríquez de Luna. En concreto, en las instalaciones se procesaron PCR y se trabajó en la búsqueda de medicamentos contra la Covid-19.
Un virus que está catalogado en el nivel de riesgo 3. Pero eso no es un problema para GSK, ya que el centro cuenta con un laboratorio de nivel de contención biológica 3. "Es el único que tiene GSK y está en España, en las instalaciones de Tres Cantos", han explicado durante la visita a las instalaciones.
Desde su inauguración, el centro ha apostado por un modelo de investigación basado en la innovación abierta que facilita el intercambio de información, el acceso a nuevas tecnologías y la colaboración entre distintos grupos o laboratorios.
En esta línea, destaca especialmente la labor de la Tres Cantos Open Lab Foundation, que permite a científicos y académicos independientes de entidades de todo el mundo acceder a las instalaciones para realizar sus propios estudios.
Hitos
Muchos son los hitos que han marcado las tres décadas de vida del centro de I+D de Tres Cantos. Ejemplo de ello es la publicación en la revista Nature del 'Tres Cantos Antimalarial Set', un importante punto de partida para el descubrimiento de fármacos orales contra la malaria. Fue en 2010.
Años más tarde, en 2016, se publicaron las llamadas “kineto-boxes”, compuestos inhibidores de los parásitos de la Leishmaniasis, la enfermedad de Chagas y la enfermedad del sueño.
Además, la compañía ha desarrollado el primer medicamento contra el VIH y la primera vacuna preventiva contra la malaria recomendada por la OMS. Y no solo eso. En el área de tuberculosis, el centro de I+D de Tres Cantos lidera un proyecto científico para acelerar el desarrollo de antibióticos desde 2020.