Enfermería, tradicionalmente desempeñada por mujeres, es una de las profesiones más estereotipadas del país a lo largo de los años. Los avances y los logros cosechados no acaban de conseguir acabar con los tópicos que persiguen a las enfermeras, según se constata en la 'Encuesta imagen y estereotipos de la profesión enfermera en España'. Este informe arroja que nueve de cada 10 enfermeras y enfermeros piensan que persisten los estereotipos sexistas y retrógrados vinculados a la profesión.
Las conclusiones obtenidas son preocupantes. El porcentaje que denuncia la existencia de clichés vinculados con su profesión se eleva con respecto a hace cinco años, cuando se realizó otro sondeo similar. Por aquel entonces, la cifra se situaba en el 87 por ciento.
"El hecho de que sean más las enfermeras que denuncian ahora esta realidad denota que el paso de los años no ha conllevado una mejora de la situación, sino un empeoramiento, lo que demuestra que estamos fallando como sociedad a la hora de reconocer y tratar como deberíamos a todo un colectivo profesional por el mero hecho de estar conformado de manera mayoritaria por mujeres", lamentan desde el Sindicato de Enfermería (Satse), impulsor del sondeo.
[Siete de cada diez profesionales del Sistema Nacional de Salud agredidos son mujeres]
La encuesta recoge más de 2.000 comentarios personales de las enfermeras y enfermeros, que constatan que aún persisten las faltas de respeto y, en ocasiones, hasta de desprecio. Eso sí, con diferencias notables entre hombres y mujeres.
Los comentarios aluden a que al hombre se le asigna socialmente un estatus o categoría superior, mientras que a la mujer se le sigue atribuyendo un rol arcaico. Según las profesionales consultadas, son comunes expresiones como "tú no sabes, que venga un hombre que sí sabe".
Comentarios sexualizados
Los comentarios sexualizados también son frecuentes en el día a día de la profesión. Desde seguir siendo generalizado el uso de términos como "niña" o "bonita" hasta otros muchos más hirientes, denigrantes y ofensivos. Unos estereotipos sexistas y retrógrados que suponen un retroceso en el desarrollo profesional de las enfermeras y enfermeros, según el 76 por ciento de los encuestados. "No soy tu niña ni tu cielo, soy tu enfermera", remarca una de las sanitarias consultadas.
Por otro lado, una aplastante mayoría, el 92,8% de las enfermeras, considera que no tiene el reconocimiento y visibilidad social que les corresponde por su cualificación y competencia profesional. Aún así, el 24,9% de los profesionales encuestados opina que tras la pandemia del Covid-19 la situación ha mejorado.
El estereotipo o imagen irreal más presente es, según ocho de cada 10, es el de ser "profesión dependiente de otro colectivo sanitario". El cliché que, según las enfermeras y enfermeros, está más extendido en segundo lugar es el de ser "profesión vocacional sin cuerpo de conocimientos propio" (50,29%). Les sigue el de ser "profesión sexualizada" (39,79%), "exclusivamente femenina" (37,24%) y "sin formación universitaria de Grado" (23,24%).
Según los participantes, estos estereotipos suponen un retroceso en el desarrollo profesional, aunque se observan diferencias con los resultados reflejados en 2018. En aquel año, la encuesta arrojaba que el 88,79% sí que lo creían en aquel momento al 76% que lo creen ahora.
Agresiones a sanitarios
Esta encuesta, realizada por la semana del Día Internacional de la Mujer, también se adentra en una de las problemáticas que más atañen a la profesión: las agresiones verbales por parte de pacientes y familiares.
A este respecto, más de la mitad de las enfermeras (54,9%) y enfermeros (50,1%) han sufrido en primera persona o conocen a algún compañero o compañera que haya sido víctima de comentarios ofensivos y denigrantes basados en la imagen estereotipada y sexista de la profesión.
De estos, el 71,5% opina que son los medios de comunicación, seguidos de lejos por los ciudadanos (53,42%), redes sociales (52,91%) y administraciones públicas (52,42%), los responsables de este tipo de comportamientos
A este respecto, en 2022, la Policía Nacional registró 241 denuncias por ataques a personal sanitario, lo que supone un aumento del 7% respecto al año anterior, cuando se notificaron 225. Es más, según los datos, cuatro de cada 10 son físicas. La Policía Nacional cifra en 8.812 las actuaciones que se llevaron a cabo para hacer frente a los altercados con sanitarios.
Observatorio de la Mujer en el ámbito sanitario
Con la llegada de Carolina Darias al Ministerio de Sanidad, en enero de 2021, el sindicato enfermero propuso la creación de un Observatorio de la Mujer en el ámbito sanitario. ¿El objetivo? Trabajar para acabar con esta lacra que sufren aún las profesionales sanitarias en España.
"Con estas iniciativas, trabajamos para alcanzar esa visibilidad real de la profesión, lastrada en muchos casos por la invisibilidad de unos cuidados, que, además, al ser prestados por una profesión mayoritariamente femenina, añaden una doble discriminación que condiciona a una profesión vital para la sociedad", subrayan desde el sindicato.
Tres años antes, en 2018, el PSOE ya se hizo eco de la propuesta de Satse y presentó una Proposición no de Ley en la que reclamaba al Gobierno un Plan sobre igualdad y no discriminación en la profesión sanitaria, que incluía precisamente la puesta en marcha de este observatorio.