El Instituto Federal de Alemania de Medicamentos y Dispositivos Médicos, el regulador farmacéutico germano, está estudiando la posibilidad de prohibir las exportaciones de Ozempic, el tratamiento contra la diabetes y la obesidad de Novo Nordisk.
La razón es que este tratamiento es más barato en Alemania, lo que ha provocado que parte del suministro alemán de Ozempic acabe fuera del país. "Necesitamos el medicamento para el cuidado de los pacientes con diabetes y no como un fármaco para mejorar el estilo de vida", ha dicho el presidente del regulador alemán, Karl Broich, en una entrevista con el semanario Der Spiegel que recoge Europa Press.
La demanda de este tratamiento desarrollado por la compañía danesa Novo Nordisk se ha disparado por los resultados logrados para reducir peso. De hecho, la Agencia Europea del Medicamento ha emitido una alerta de escasez del tratamiento.
"Sabemos que algunas de las jeringas que se envían a Alemania para nuestros pacientes con diabetes acaban en otros países europeos o en Estados Unidos. Esto es un gran problema", ha explicado Broich.
Es por esto por lo que el presidente de la agencia alemana ha avisado de que podría plantearse "emitir una prohibición de exportación" para garantizar que Alemania cuente con suficiente suministro para los pacientes en el país si los esfuerzos actuales.
Además de Alemania, otros países europeos han comenzado a imponer restricciones al uso del medicamento de Novo Nordisk para proteger el suministro. Por ejemplo, Bélgica decidió esta semana prohibir temporalmente su uso como tratamiento para perder peso, después de que se recomendase su prescripción exclusivamente para pacientes con diabetes.