Madrid lleva muchos años con un problema de falta de vivienda ante la creciente demanda y un consiguiente encarecimiento tanto de la existente como de la que salía al mercado. El escaso y codiciado suelo en el centro hacía necesario ampliar el rango de acción urbanística.
Al echar un vistazo al término municipal de la capital se ve el escaso margen de maniobra para construir viviendas que dejan localidades limítrofes como Pozuelo de Alarcón, Alcorcón, Getafe, Leganés, Coslada o Alcobendas.
Por ello, el gran banco de suelo para la construcción de obra nueva quedaba prácticamente limitado al espacio existente entre la M-45 y la M-50 al sur de Vallecas y Vicálvaro. Sin embargo, dos nuevas zonas han resurgido en los últimos años para alegría de promotores y posibles compradores: el entorno Mahou-Calderón y Madrid Nuevo Norte.
Norte, centro y sur
Tras casi 30 años de litigios, Madrid Nuevo Norte (MNN) ha sido aprobado definitivamente por Comunidad y Ayuntamiento de Madrid. Dentro de la punta de flecha que forman los terrenos adyacentes a las vías de ferrocarril que salen de Chamartín, una vez desarrollados Las Tablas y Sanchinarro y con Valdebebas a pleno rendimiento urbanístico, Distrito Castellana Norte (DCN) tiene prevista la construcción de 10.500 viviendas.
Tal y como confirmó la promotora del proyecto en la presentación de la maqueta digital que podrá visitarse en septiembre en la Real Casa de Correos, la primera fase de viviendas comenzará las obras en tres años. Por tanto, si todo va bien, entregará las llaves de las primeras casas en 2026.
Dentro de la M-30, las opciones de construcción son muy limitadas. Sin embargo, el entorno Mahou-Calderón supone una de las pocas posibilidades de encontrar un número importante de viviendas nuevas en el centro de la capital. Eso sí, por las promociones que ya se comercializan, el que quiera comprar un piso tendrá que rascarse el bolsillo.
Ibosa y Azora (junto a CBRE y Gestilar) ya han presentado sus primeras promociones: Zaurak y River Park, respectivamente. El precio habla por sí solo. En el caso de Residencial Zaurak, las viviendas disponibles van desde 406.238 euros (dos habitaciones) hasta 781.501 euros (cuatro habitaciones). Una media que ronda los 5.000 euros/m². Los precios de la promoción River Park están entre 309.000 euros (piso de una habitación) y 765.000 euros (tres dormitorios). El metro cuadrado sale a partir de 4.500 euros.
Por último, la zona más amplia y asequible para encontrar una vivienda en Madrid capital: los desarrollos del sureste. Eso sí, más cerca de Coslada o Rivas que de la Puerta del Sol. Mayor distancia implica menor precio del suelo y con ello casas bastante más baratas que en los otros dos entornos mencionados.
Los desarrollos del sureste están formados por los barrios del Cañaveral, Los Cerros, Los Ahijones, Los Berrocales y Valdecarros. El primero de ellos es el único que tiene viviendas ya construidas y muchas promociones en las distintas fases de desarrollo. Se pueden encontrar casas desde 144.000 euros (sin IVA), según muestra el portal inmobiliario Idealista. De ahí hasta más de 500.000 euros por un chalé adosado en una urbanización privada con dos piscinas, pista de pádel y zonas infantiles.
Entre Valdecarros (51.656), Los Cerros (14.276), Los Berrocales (22.285) y Los Ahijones (16.520) sumarán más de 100.000 vivienda de obra nueva a la capital. Fuentes de estos desarrollos consultadas por Invertia esperan ver las primeras grúas antes de que termine la actual legislatura municipal prevista para 2023 (si no hay sorpresas).
Estos tres entornos, unidos a las 11.400 viviendas aún pendientes de levantar en Valdebebas, confirman una gran bolsa de obra nueva que está por llegar a la capital con el objetivo de aliviar precios y aumentar la oferta disponible.