En concreto, de los 1.151 millones de euros destinos a la rehabilitación, de momento sólo se han convocado 477,5 millones. Es decir, que sólo se han cursado por parte de las comunidades autónomas el 40%. Y conviene recordar que si no se tramitan en los tiempos definidos (30 de noviembre de 2023), deberán ser devueltos a la Unión Europea (UE).

Las últimas CCAA que se han sumado al carro de las ayudas han sido el País Vasco y la Región de Murcia, así como la Ciudad Autónoma de Melilla. Esta última destinará un millón de euros. En el caso del País Vasco, ha convocado cerca de 40 millones de euros en ayudas para la rehabilitación energética de edificios y viviendas. La Región de Murcia, por su parte, ha presupuestado 9,8 millones de euros.

Deberes por hacer

Son cuatro CCAA las que todavía no han dado el paso, más la Ciudad Autónoma de Ceuta. Se trata de Canarias, Baleares, La Rioja y Asturias. “Acelerar el proceso sigue siendo una cuestión urgente para poder hacer el mejor uso de estos fondos y evitar su devolución a Bruselas”, remarca Pablo Martín.

Conviene recordar que el 51,3% de las viviendas en España tienen más de 40 años. Y que más del 80% de los edificios en España tienen una calificación energética E, F o G (las menos eficientes).

“Todas las mejoras en sostenibilidad, eficiencia energética, accesibilidad y digitalización que supondrán las actuaciones de los fondos next gen aumentarán la calidad de vida de los vecinos y generarán ahorro energético y disminución de las emisiones de CO2”, sostiene Enrique Sánchez, director general de IESA.

Pero más allá de su puesta de largo, también conviene recordar que no todas las CCAA han convocado todos los programas previstos. En concreto, hay cinco programas que van desde las rehabilitaciones a nivel edificio hasta aquellas otras relacionadas con la mejora de la eficiencia energética.

[Así se puede acceder a las ayudas para rehabilitación de vivienda de los fondos europeos Next Generation]

La única que ha cubierto el espectro es Extremadura. Aragón, Castilla-La Mancha, Comunidad Valenciana y Cataluña amplían su abanico a cuatro programas.

Cantabria, Comunidad de Madrid, Navarra, Galicia, País Vasco y la Región de Murcia se quedan en tres programas. Y por debajo están Andalucía y Castilla y León.

Acceso complejo

Una vez puestos en marcha los programas, surge otro problema. “Acceder a las ayudas está resultando altamente complejo, especialmente para aquellas empresas que trabajan en más de una comunidad. Y todo porque los requisitos y especificidades varían entre regiones, a pesar de tener el mismo objeto, lo que dilata la gestión administrativa”, se lamenta Pablo Martín.

Por si fuera poco, las comunidades de propietarios tampoco están siendo ágiles a la hora de dar el paso. “En el caso de las ayudas a la rehabilitación de edificios, nos encontramos con que las solicitudes quedan paralizadas por una cuestión de presupuestos”, reconoce Martín.

Y añade: “Las comunidades de propietarios son reacias a comenzar las actuaciones sin tener la ayuda concedida. Y los largos plazos de gestión desaniman a las constructoras a apostar por esta vía”

Asimismo, hay poco conocimiento sobre los fondos next gen. “Ciudadanos y administradores de fincas todavía no tienen toda la información. Por ejemplo, conocer que las ayudas van del 40% al 80% del importe de la obra además de las ventajas fiscales de dichas ayudas y, por supuesto, la revalorización de la vivienda”, remarca Enrique Sánchez.

Por comunidades autónomas, del total asignado en el BOE, la que más volumen ha movilizado ha sido Navarra (70,8% del total), seguida de País Vasco (69,9%) y Extremadura (66,7%). En el otro lado de la balanza (sin contar las cuatro que no han dado el paso), están Andalucía (30%), Madrid (36%), Murcia (37,8%) y Galicia (40,3%).