Baja el número de ejecuciones hipotecarias sobre viviendas habituales. Así, en el segundo trimestre, se situó en 3.165. Se trata de la cifra más baja desde el último trimestre de 2020. Además, supone un descenso del 4,1% respecto al mismo periodo de 2021 y del 4,7% en relación con el trimestre anterior.
Conviene recordar que una ejecución hipotecaria, o acción hipotecaria, es el procedimiento mediante el cual el acreedor hipotecario, que suele ser una entidad financiera, puede cobrar su deuda mediante la ejecución de la garantía (es decir, la vivienda hipotecada). Esto sucede si el deudor no cumple con su obligación de pagar las cuotas.
Según los datos facilitados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), estamos ante el primer descenso que se registra en las ejecuciones hipotecarias sobre vivienda habitual tras siete trimestres de alza.
Otras fincas
El número de inscripciones de certificaciones por ejecuciones hipotecarias iniciadas en los registros de la propiedad en el segundo trimestre de 2022 fue de 7.115. Por tanto, se trata de un 10,7% menos que el trimestre anterior y un 27,4% menos que en el mismo trimestre de 2021.
Por lo que respecta a las inscripciones por ejecuciones hipotecarias iniciadas sobre viviendas de personas físicas, éstas disminuyen un 7,4% en tasa anual. Entre ellas, 3.165 son habituales en propiedad (un 4,1% menos) y 692 no son residencia habitual de los propietarios (un 19,8% menos).
Las ejecuciones hipotecarias sobre fincas urbanas bajaron un 27,7% interanual en el segundo trimestre y un 11,8% en relación con el trimestre anterior. Dentro de las fincas urbanas, 4.596 ejecuciones correspondieron a viviendas, un 23,6% menos que en el segundo trimestre de 2021 y un 11,8% menos respecto al trimestre anterior.
Las ejecuciones hipotecarias sobre viviendas concentran el 64,6% del total de ejecuciones hipotecarias en el segundo trimestre de 2022, según el INE. El 44,5% del total de ejecuciones hipotecarias son viviendas habituales de personas físicas. Por su parte, el 10,4% corresponde a viviendas de personas jurídicas (son 739 ejecuciones, un 60,2% menos en tasa anual) y el 9,7% a otras viviendas de personas físicas.
Por su parte, las ejecuciones hipotecarias de otras fincas urbanas (locales, garajes, oficinas, trasteros, naves, edificios destinados a viviendas, otros edificios y aprovechamientos urbanísticos) suponen el 27,7% del total.
“Las caídas del 11% respecto al trimestre anterior y del 23% respecto al mismo periodo del 2021, sitúan los datos claramente por debajo de las 5.000 ejecuciones en un trimestre, como ha sucedido en cinco de los últimos seis periodos", afirma Ferran Font, director de Estudios de pisos.com.
Y añade: "En cambio, las ejecuciones sobre vivienda habitual siguen mostrando más dificultades en disminuir y, aunque respecto al año anterior el retroceso es del 4%, siguen sin bajar de las 3.000 por tercer trimestre consecutivo. Por otro lado, cinco de cada diez ejecuciones sobre vivienda corresponden a hipotecas concedidas en el periodo 2005-2008”.
Por comunidades autónomas, las que tienen un mayor número de certificaciones por ejecuciones hipotecarias sobre el total de fincas en el segundo trimestre son la Comunidad Valenciana (1.552), Andalucía (1.410) y Cataluña (1.186). Por su parte, La Rioja (48), Comunidad Foral de Navarra (49) y País Vasco (81) registran el menor número.
En el caso de viviendas, Comunidad Valenciana (1.054), Andalucía (1.041) y Cataluña (804) presentan el mayor número de ejecuciones. Los menores se dan en Comunidad Foral de Navarra (20), La Rioja (35) y Cantabria (44).
El objetivo principal de esta estadística es ofrecer trimestralmente el número de certificaciones de ejecuciones hipotecarias iniciadas e inscritas en los Registros de la Propiedad durante el trimestre de referencia. Estadística hace hincapié en que no todas las ejecuciones de hipoteca terminan con el lanzamiento (desahucio) de sus propietarios.