La entrada en vigor de la Ley de Vivienda, que impone que los alquileres no puedan subir este año más de un 3%, ha tenido notorias consecuencias en el mercado de Sevilla. Los caseros se están pasando a la modalidad de contratos por temporada, una tipología a la que no aplica esta norma; pueden por tanto aplicar subidas superiores si así lo desean.
La tendencia la recoge Idealista. Sevilla es una de las capitales españolas donde más despega este fenómeno de los contratos por temporada: han crecido un 83% en el último trimestre de 2023, si se compara con idéntico periodo del año precedente.
Son veinte puntos más de lo que crece a nivel nacional esta modalidad de alquiler, que se define como aquel que no se destinan a satisfacer una necesidad permanente de vivienda, sino que sirven al alojamiento durante un periodo de tiempo corto, por lo general, inferior al año.
Esquivan la Ley de Vivienda
Los contratos por temporada son soluciones populares para trabajadores desplazados de su ciudad por periodo acotado, y también para el que desea alojamiento para realizar alguna actividad formativa.
En todo caso, lo esencial de estos contratos -y que explica según Idealista su ascenso "meteórico"- es que están fuera de la Ley de Vivienda.
Al final, se rigen por la voluntad de las partes, por lo que no les aplican aspectos de la nueva norma, como las limitaciones en las actualizaciones de la renta o las prórrogas extraordinarias del contrato.
Desplome del alquiler tradicional
En paralelo, el alquiler tradicional se desploma en la ciudad. Los contratos de larga estancia han caído un 32% en Sevilla en el último trimestre del año, convirtiéndose en la tercera ciudad de España con mayor descenso tras Bilbao (-38%) y San Sebastián (-32%).
Son datos que "ponen de manifiesto como legislar de espaldas a los propietarios puede acabar destruyendo el mercado", ha remarcado Francisco Iñareta, portavoz de Idealista.
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Iñareta cree que las medidas adoptadas en materia de alquiler han trasladado la oferta del alquiler permanente al alquiler de temporada, "una formula perfectamente legal pero que viene a dificultar aún más el acceso a la vivienda de las personas y las familias más desfavorecidas".
El Gobierno, abierto a regular el alquiler de temporada
Que podría haber un trasvase hacia el alquiler de temporada era algo que contemplaba el sector desde hacía tiempo. Y en noviembre el PSOE lanzó que estaba dispuesto a regular también esta modalidad durante la presente legislatura.
"Los contratos temporales son la gran estafa a la que nos enfrentamos muchos inquilinos. Caseros que obligan a firmar por pocos meses para subirnos el alquiler sin límites saltándose la Ley de Arrendamientos Urbanas", señalaban en mayo los sindicatos de inquilinos.