Intentar vivir de alquiler se está convirtiendo en toda una carrera de obstáculos para quienes desean hacerlo. Para empezar, porque el precio sigue con su particular senda alcista. Así, y según diferentes portales inmobiliarios, la subida entre enero de 2023 y 2024 ha oscilado entre un 7,78% y un 10,8%.

Una circunstancia que está poniendo en serios aprietos a buena parte de la población que quiere optar por el alquiler. Subidas que contrastan con los límites que deberían aplicarse, según la Ley de Vivienda: 2% en 2023; 3%, en 2024; y, a partir de 2025, según un nuevo índice que debe crearse.

Por tanto, el futuro que se les presenta a esos ciudadanos no es nada halagüeño. Entre otras razones, porque los precios seguirán al alza. Como consecuencia, el esfuerzo que tendrán que hacer para acceder a una vivienda de alquiler será superior.

¿Qué subidas acechan a los inquilinos?

Aunque los contratos que se tengan que renovar tienen el límite del 3% antes reseñado, los nuevos contratos no tienen límite alguno. Poniendo el foco en esa renovación, hay un dato que conviene ser tenido en cuenta por los inquilinos.

Ese dato no es otro que el siguiente: si tu casero no te subió el precio del alquiler el año pasado, este año podría aplicar una subida en la renta mensual del 5%. Es decir, el 2% del pasado año, y el 3% de este año.

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Así lo apuntan desde Círculo Legal, que señala que estos porcentajes podrían ser acumulativos en caso de no haberse aplicado la subida el pasado año. Eso sí, no se pueden aplicar con carácter retroactivo.

“El propietario está obligado a notificar al inquilino la subida con 30 días de antelación”, matiza Arantxa Goenaga, socia y abogada de Círculo Legal Barcelona.

¿Qué sucede con el esfuerzo financiero?

La constante subida del precio del alquiler hace que el esfuerzo financiero que hay que dedicar al mismo aumente a la par. Dicho de otra manera, los precios del alquiler siguen poniéndoselo difícil a la demanda.

“Lo que piden los propietarios está muy por encima de su capacidad de endeudamiento, obligándoles a ampliar su búsqueda a zonas que no encajan con lo que tenían pensado o a conformarse con pisos más pequeños o desactualizados”. Así opina Ferran Font, director de Estudios de pisos.com.

Carteles de vivienda en alquiler. Invertia

Así, por ejemplo, sólo el 16% de los jóvenes vive emancipado. Es un dato del Observatorio de Emancipación del Consejo de la Juventud de España. En concreto, y en el caso de que quieran vivir solos, deben destinar el 90% de sus ganancias al alquiler. Según pisos.com, y con el nivel actual de salarios, la mayoría de los jóvenes tendrían que destinar el 80% al alquiler.

Sea el 90%, o el 80%, sigue siendo un verdadero muro de acceso al alquiler. Porque, en este punto, conviene recordar que el esfuerzo financiero del alquiler y otros gastos adicionales, como los suministros, no deben superar el 30% de los ingresos.

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Y la situación, lejos de mejorar, apunta a empeorar. Porque el 40% de las inmobiliarias prevé nuevas subidas del precio del alquiler. Así se desprende de la 'Encuesta de Sensibilidad Inmobiliaria (ESI)' del marketplace inmobiliario Idealista.

Dichas inmobiliarias ponen el foco en la pérdida de stock que está sufriendo el mercado. Significativo es el dato de que una de cada cuatro no logra captar viviendas para arrendar. Y eso se traduce en unas expectativas de mayores aumentos de los precios de las rentas.