Ministra Calviño: 'Sin caja no hay paraíso'
El Presupuesto del Estado del Gobierno Sánchez para 2020 es un caramelo envenenado. Para empezar, no cuadra. La Comisión Europea y la AIReF (Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal) española no aprueban las cuentas de Economía. Tampoco la propia ministra que ha equilibrado su cuadro macroeconómico a martillazos.
Nadie se cree los ingresos fiscales presentados por el Ministerio de Economía. No es posible que en 2020 se ingrese lo que dicen los expertos de Nadia Calviño con: un IVA, con tres meses de parón económico, el turismo y el consumo interno a la baja; un IRPF con los sueldos reducidos y ERTES alargados; ni con un Impuesto de Sociedades con los beneficios de las empresas en duda.
Nadie se cree que las reducciones en los impuestos tradicionales sean sustituidas: a) por el "pretendido impuesto de reconstrucción" sobre la riqueza de las familias que anuncia alguna parte del Gobierno y es en parte confiscatorio; b) los impuestos digitales, que tiene que armonizarse con Europa; y c) el nuevo impuesto de transacciones financieras. Y ya se sabe: Señora Calviño, parafraseando una serie televisiva española, "sin caja no hay paraíso".
Para tener caja suficiente este año el Gobierno tiene tres alternativas: a) reducir los dispendios de sus viernes sociales y alegrías de primeros días de legislatura; b) pedir mucho, pero que mucho, dinero a la Unión Europea; c) aumentar más la deuda pública del Reino de España.
La alternativa de reducción de gastos sociales es casi imposible con UP como socios de Gobierno. De momento, el Consejo de Ministros va a aprobar el Ingreso Mínimo Vital que puede suponer otros cuantos miles de millones de euros de gasto adicional. Aunque el apego al sillón de los de Iglesias puede hacer que renuncien a cualquier política social. Ellos también saben que "sin dinero en el bolsillo (ahora en su cuenta corriente) no hay paraíso".
La petición de ayuda financiera abundante a la Unión Europea tendrá sus consecuencias: "El rescate". El Gobierno anda proclamando que los primeros 20.000 millones de euros que recibirá de Europa no tienen condiciones. No dice toda la verdad. Están condicionados a que se dediquen a los gastos excepcionales sanitarios derivados de la pandemia ¡Ya veremos qué pasa con los siguientes desembolsos!
Los primeros 20.000 millones que se pidan a Europa están condicionados a gastos excepcionales sanitarios
El endeudamiento público es pan para hoy y hambre para mañana. Se calcula que de no tomar medidas España llegará este año al 120% del PIB de deuda Pública. A pesar de los bajos tipos de interés, en la última emisión de bonos de España ya no fueron negativos. Si aumentamos el endeudamiento subirá la prima de riesgo (lo está haciendo) y empezará a crecer el servicio de la deuda (intereses).
Además de todo esto, el Presupuesto necesita votos para ser aprobado. El Gobierno tiene enfadado a uno de sus socios preferenciales: ERC. En la última prórroga del estado de alarma sustituyó a ERC por Ciudadanos.
Ciudadanos está en la encrucijada. Quiere ser partido bisagra. Ahora y aquí con el PP, luego y allá con el PSOE, equilibrio de malabarista. C’s siempre ha tenido dos almas, la socialdemócrata y la liberal. Con el Gobierno de Sánchez socialdemócrata; con las autonomías del PP liberal. Algunos a esa dualidad la llaman ser de centro, otros la califican de tibieza.
Ciudadanos está en la encrucijada. Quiere ser partido bisagra. Equilibrio de malabarista
Mi teoría es que los partidos de centro puro en España mueren tarde o temprano. Pasó con: la UCD (donde fui diputado en el Congreso); la operación reformista de Roca; el CDS de Adolfo Suarez; la UPyD de Rosa Diez… Si tienes un partido de centro-izquierda a un lado y uno de centro-derecha al otro, el sándwich acaba comiéndote. ¿Pasará con Ciudadanos?
El dilema de Arrimadas es si "arrimarse" al Presupuesto de Sánchez, acentuando su parte socialdemócrata, o no. A Sánchez le interesa tener un sustituto de ERC por si acaso le fallan los republicanos catalanes. Además, con la excusa de que es necesario el apoyo de C’s, Sánchez podría presionar a Iglesias y los suyos para que aceptasen recortes sociales, al menos momentáneos; eso también satisfaría en parte a la Comisión Europea.
Por tanto, las dos dudas de este Presupuesto son: cómo conseguir caja para que haya paraíso presupuestario; y sí, para eso, Arrimadas debe "arrimarlo".
*** José Ramón Pin es profesor del IESE.