¿Cuánto han bajado los pisos tras eliminar la desgravación a la primera vivienda?
¡Cuidado! Se avecina la eliminación en la desgravación de los planes de pensiones. La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) lo recomienda y surgen voces que indican que solo beneficia a los más acaudalados –hay 7,5 millones de españoles con planes de pensiones individuales- y además es un negocio cautivo de la banca. Ambos argumentos son fácilmente refutables.
El primero es que con 7,5 millones de planes no hablamos de un selecto grupo de la población española, sino que son propietarios las clases medias. El segundo es aún más falso por cuanto los planes de pensiones se pueden movilizar a otros bancos o a gestoras independientes. Los casos de enfermedad grave, paro prolongado o la posibilidad de rescates parciales al cabo de 10 años desdicen la cautividad del producto.
Pero hay que reconocer que estos argumentos calan en la población y hacen más fácil eliminar la desgravación de este producto financiero. Enfrentamientos entre ricos y pobres, y la intrínseca maldad de la banca ayudan a vender esta reducción de impuestos que se convierte en recaudación cuando llega la edad de jubilación ya que cotizan como rentas del trabajo que no han soportado ninguna retención.
Con 7,5 millones de planes no hablamos de un selecto grupo de la población española, sino que son propietarios las clases medias
Además, es muy difícil saber cuánto dinero deja de ingresar Hacienda por esta desgravación. En España no hay un solo estudio serio que lo indique. Ya que la desgravación -fácilmente calculable- tendría que ser aminorada con los ingresos futuros cuando el ahorrador se jubila. En esta parte, nadie se ha molestado en hacer las cuentas.
Y esta reflexión sobre la manipulación que se hace de acuerdo a las necesidades recaudatorias de Hacienda, tiene un precedente muy claro en la eliminación de la desgravación de la primera vivienda que entró en vigor en enero de 2013 con Mariano Rajoy al frente del Gobierno.
En la primera vivienda es más fácil calcular lo que Hacienda ha dejado de perder de haber mantenido la desgravación. Antes del año 2013, el coste era de unos 4.500 millones de euros. Una cifra, lógicamente variable, y que se ha reducido hasta los 1.000 millones de euros en 2019 debido a que los que aún tienen hipotecas anteriores a 2013 sí pueden descontarse el 15% de sus pagos con el límite de 9.000 euros (18.000 en caso de matrimonio).
Pero en vez de afrontar este fin de la desgravación en la adquisición de la primera vivienda con el aceptable argumento de recaudar más, se recurrió a la demagogia de que esta medida pondría fin a la especulación de los precios en un bien de primerísima necesidad. Muy oportuno tras la explosión de la burbuja inmobiliaria en España que agudizó la crisis financiera y nos enseñó por vez primera que los precios de los pisos también caían… y mucho.
Bruselas defendía claramente eliminar la desgravación con el fn de alejar los fantasmas de la burbuja. Y ya se sabe que todo lo que dice Bruselas, va a misa
Han transcurrido siete años, tiempo más que suficiente para conocer si se ha producido la ansiada bajada de precios en la vivienda o, al menos se ha frenado la subida.
Bruselas defendía claramente esta posición, aconsejando eliminar la desgravación con el fin de alejar los fantasmas de la especulación y la burbuja. Y ya se sabe que todo lo que dice Bruselas, va a misa. Nada se decía de impulsar el cooperativismo o aumentar la vivienda de protección oficial, prácticamente olvidada, o nuevas fórmulas para liberalizar suelo.
Pues bien, después de este septenio, el precio de la vivienda media en España ha subido solo el 0,81%, pasando de los 1.372 euros el metro cuadrado a 1.383 euros, según los datos de Tasaciones Inmobiliarias (Tinsa). La cosa cambia radicalmente cuando se consultan los precios de grandes ciudades como Madrid o Barcelona.
Así, el precio de la vivienda en la capital de España ha subido el 26,6% de media desde los 2.395 euros el metro cuadrado hasta los 3.033 euros. Más aún ha sido el empuje que han vivido los precios en Barcelona con un alza de nada menos que el 37,7% hasta los 3.335 euros por metro cuadrado que se pagan ahora. En San Sebastián, la capital más cara de España, el precio ha crecido un 8,6% en estos siete años, de acuerdo con los datos de la tasadora.
Debería preocupar mucho más a las autoridades una buena y transparente gestión que se traduzca en mayores ganancias para los ahorradores
Las fortísimas subidas en Madrid y Barcelona están muy por encima del crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) en términos nominales (no incluyendo el derrumbe producido en lo que va de 2020 como consecuencia de la Covid-19).
En 2013, la economía registró una caída del 1,4% debido a la crisis del euro y luego se fue recuperando, con un 3,8% en 2015 como año de mayor crecimiento. En conjunto la riqueza de la economía española aumentó el 22%. Pero si se toma como referencia el PIB per cápita, este subió solo el 8,6% en estos siete años.
¿Ha frenado el precio de la vivienda la eliminación de la desgravación? No en las grandes ciudades donde se han producido aumentos muy significativos. Aquí habría que considerar los movimientos hacia las grandes urbes en detrimento del medio rural, después de la crisis de 2008 que ha fortalecido la tendencia de la España vacía.
No se ha conseguido plenamente ese objetivo de una moderación de precios que se anunciaba con este recorte fiscal. De igual manera, el fin de los planes de pensiones puede acabar con este producto en el que debería preocupar mucho más a las autoridades una buena y transparente gestión que se traduzca en mayores ganancias para los ahorradores. En quince años, la rentabilidad media anual ha sido de tan solo el 1,9%.
*** Luis Aparicio es editor de inversionycarteras.es y fue director de Invertia entre 2005 y 2018.