La frase no es mía, sino de un banquero que, como bien saben ustedes son expertos en evaluar riesgos e identificar oportunidades para rentabilizar su dinero. Lo dijo el presidente de BBVA, Carlos Torres Vila, en 'Wake Up, Spain!': "Tenemos el recurso natural, el nuevo petróleo, que es el sol y el viento".
'¡Despierta, España!', que también podría ser '¡Espabila, España!'. Después de cuatro días en el foro organizado por EL ESPAÑOL, Invertia y D+I, ha quedado claro que nuestro futuro pasa por poner en valor nuestra buena relación con la estrella luminosa en varios frentes. Pero el éxito no está garantizado, lean hasta el final.
Las horas de sol de las que disfrutamos en España y la intensidad con la que recibimos sus rayos son una gran oportunidad en la hoja de ruta de economía verde que ha trazado la Unión Europea en Next Generation.
Si los noruegos tuvieran este petróleo -en lugar de su 'oro negro'- también lo aprovecharían en otro gran frente: el del turismo. Con un matiz, que puso sobre la mesa Antonio Catalán, no el del modelo low cost de Magaluf, sino el del alto valor añadido porque -y todavía no nos hemos enterado- en España no tenemos competencia en este nicho y no sabemos ponerlo en valor.
La seguridad, la red de hospitales a los que se puede acudir en caso de accidente, la infraestructura de hoteles, el patrimonio artístico y arquitectónico, el calor en el invierno del que se puede disfrutar en las islas... Forman parte de una oferta que se tiene que cobrar. Y más en un país en el que el SMI alcanza ya los 900 euros en 14 pagas.
La 'materia prima' da sentido a la reclamación que hace el sector de tener un papel más protagonista en el reparto de fondos europeos porque, como resumió Javier Sánchez Prieto, presidente de Iberia, "no es casualidad que España sea una potencia turística".
Sin embargo, el Gobierno quiere que este país sea algo más que un destino de "sol y playa" para los europeos. Y Teresa Ribera tiene claro que quiere ser un punto de origen para llevar la energía que produce el astro a la futura Europa verde.
Tiene el compromiso inversor de Ignacio Galán, Francisco Reynés, José Bogas, Josu Jon Imaz o José Manuel Entrecanales para colocar a España en la vanguardia del cuidado del clima y rebajar los costes de la factura energética, algo que beneficiaría a todos los sectores de la economía.
Sin embargo, además de servir para estas loables metas, la transición ecológica puede llegar a ser un buen negocio para los españoles.
Lo explicó la presidenta de REE, Beatriz Corredor. "Europa necesita las renovables españolas" para hacer realidad sus objetivos de descarbonización.
Esto no es baladí para un país que siempre ha padecido las consecuencias de su fuerte dependencia energética del exterior.
Lo que ocurre es que para dar respuesta a nuestros potenciales clientes europeos primero necesitamos interconexiones. Y en concreto, es crítica la interconexión del golfo de Vizcaya.
Las infraestructuras son clave para el desarrollo y las nuestras son buenas para la otra gran pata que quiere impulsar NGEU: la digitalización.
En este punto, quizás la frase más elocuente del evento fue pronunciada por José María Álvarez Pallete cuando dijo que es la primera vez que ante una revolución tecnológica, España se encuentra en posición de liderazgo.
En España hay más fibra óptica que en la suma de Alemania, Reino Unido, Francia y Portugal. Isabel Díaz Ayuso puso como ejemplo la conectividad de algunos pueblos de Madrid en los que la velocidad de internet es superior a la de algunos distritos del centro de Londres.
¿Lo tenemos todo? El prometedor discurso a futuro del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en la apertura de este evento con la modernización de la economía española cuenta con importantes escollos en el presente. Y por ello, no podemos 'despertar' sin hacer un obligado ejercicio de realismo.
El prometedor discurso de Sánchez cuenta con importantes escollos. No podemos 'despertar' sin hacer un obligado ejercicio de realismo
Contamos con las ideas, pero ¿tenemos los medios? La respuesta la esbozó la secretaria de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial, Carme Artigas y lo confirmó Unai Sordo: no tenemos la infraestructura necesaria del talento para conseguirlo. El 43% de los españoles son analfabetos digitales, lo que nos da una idea del camino que nos queda por recorrer en formación.
Esto enlaza con otro problema, el cultural. ¿Estamos preparados para impulsar esta transición hacia un nuevo mundo que ha acelerado la pandemia?
Tenemos las herramientas, de lo que ha podido dar fe la presidenta de Microsoft, Pilar López, ponente en 'Wake Up!' que jugó un papel fundamental en los meses en los que los niños españoles estuvieron confinados y se conectaron al aula con Teams. Pero nos falta el impulso definitivo para la cultura de la innovación.
Al déficit educativo y cultural se suma otro drama que puso sobre la mesa la presidenta del Santander, Ana Botín: la "pérdida de confinaza de la clase empresarial" por la duración de la pandemia y los ingentes empleos que van a desaparecer.
Y es que hablamos de futuro, pero ¿qué vamos a hacer para poder superar este presente? No nos engañemos: "queda un camino de recuperación duro y largo", dijo Botín para quien es hora de "dejar de hablar porque toca actuar".
Y actuar juntos, como pidió el presidente de Inditex, Pablo Isla, en una conversación en la que reclamó consenso. Isla habló de su negocio y recordó que la empresa que fundó Amancio Ortega nació siendo una pyme y hoy en ella conviven la cultura de pequeña, mediana y gran empresa.
Para ello han hecho falta muchos años y visión a largo plazo, algo que recomendó la académica Mariana Mazzucato al Gobierno español en su ponencia que escuchamos en la Casa de América.
Queda mucho camino para salir de esta crisis. Nadia Calviño reconoció en este foro que la recuperación económica está sujeta a múltiples incertidumbres.
Para trazar una 'hoja de ruta' que nos haga sobrellevar este duro presente son bienvenidos debates como el que protagonizaron Manuel de la Rocha y Luis Garicano en el escenario del evento, pero siempre que se encuentre un acuerdo porque la fragilidad de nuestra economía así lo reclama.
Para trazar una 'hoja de ruta' que nos haga sobrellevar este duro presente son bienvenidos debates
Y en este punto, no podemos olvidar las reformas que es preciso abordar en múltiples ámbitos y que no serán fáciles, como advirtió Antonio Garamendi y recordó el vicepresidente de la CE, Valdis Dombrovskis.
Yolanda Díaz y Fátima Báñez hablaron desde distintos atriles de la reforma laboral. La exministra del PP y el presidente de Mapfre, Antonio Huertas, pusieron sobre la mesa la de las pensiones.
Termina 'Wake Up!' y el próximo domingo podrán leer en este diario las conclusiones del foro que serán recogidas en un documento en el que ya trabajan los equipos de EL ESPAÑOL, Invertia y D+I junto con Federico Linares, presidente de EY.
'Wake Up, Spain!' ha sido, como avanzó Pedro J. Ramírez, una llamada a la acción y una plataforma de encuentro.
Ahora, toca lo que ordenó Botín en su intervención en streaming. Hacer caso a Ortega. "¡Españoles, a las cosas!".