"No queremos medio ambiente, lo queremos entero". (Anónimo).
El pasado jueves celebramos el Día de la Tierra y, en la cumbre climática virtual que se celebró, Biden prometió una reducción del 50% en las emisiones de gases de efecto invernadero de EEUU para 2030.
Combatir el cambio climático se ha convertido por fin en una prioridad a nivel mundial. El debate ya no va de izquierdas o de derechas, sino de sentido común.
Estados Unidos, la Unión Europea y China van a emplear elevados fondos públicos. Como podemos ver en este mapa de Statista, el planeta entero ya ha firmado el Acuerdo de París.
Los esfuerzos realizados para frenar el cambio climático por parte de los distintos países son coordinados desde 2016 a través de dicho acuerdo, que establece medidas vinculantes y cuantificables para frenar el calentamiento global. La más conocida es el objetivo de reducir las emisiones de dióxido de carbono a cero para el año 2050.
China (donde viven más de 1400 millones de personas, es decir, el 18,4% de la población mundial) fue responsable en 2019 del 28,8% de las emisiones mundiales de CO2; Estados Unidos, del 14,5%; la UE, del 9,7%; y la India, del 7,3%.
Dentro de Europa, España es por ahora uno de los países menos afectados por el incremento de las temperaturas que estamos experimentando en el mundo. Nos lo muestra este mapamundi de The Economist:
Según Financial Times, el veganismo no sólo protege a los animales de la crueldad, sino que combate el calentamiento global. ¿Pero cuánto? Tener un hijo menos es la opción de vida que recorta mayor cantidad de carbono anualmente, pero algunos preferirán opciones menos radicales.
Otras opciones como no tener coche, hacer un vuelo transatlántico menos al año o usar coche eléctrico reducen más emisiones que llevar una dieta vegana:
Según El Orden Mundial, el potencial de la energía solar es mayor cuanta menos atmósfera se deba atravesar. Por ello, las regiones tropicales, donde los rayos caen casi verticalmente, acumulan más energía que las zonas templadas y frías.
El ecuador es la región tropical con menor radiación solar. Y es que el clima es otro factor fundamental. Las nubosas zonas ecuatoriales reciben mucha menos energía solar que las regiones desérticas, algo que también ocurre en las zonas de clima oceánico del norte de Europa frente a las de clima mediterráneo.
El relieve influye tanto en la proximidad a los rayos solares como en el clima. Las mesetas ahorran atmósfera a los rayos solares por su altura, pero también tienden a ser más secas y soleadas que sus entornos. Los grandes sistemas montañosos acumulan nubosidad a uno de sus lados y dejan otro soleado, según la dirección de los vientos:
El hidrógeno se considera una buena opción para descarbonizar las economías y permite un mejor almacenamiento de las energías renovables según Morningstar.
Prácticamente todo el hidrógeno que se produce hoy es gris (que utiliza gas como materia prima). El objetivo es cambiar el proceso de producción para que se apoye más en el hidrógeno verde (producido a partir de renovables como la eólica, la solar y el agua) y el azul (producido a partir de combustibles fósiles, pero con un bajo impacto ambiental).
El consenso de los analistas dice que el mercado del hidrógeno crecerá entre cinco y ocho veces con respecto a los niveles actuales para 2050, pero hay tres obstáculos: la infraestructura (las instalaciones que ahora se usan para los hidrocarburos suelen ser de plástico o acero, que reaccionan mal al contacto con el hidrógeno), el coste (producir 1 kg de hidrógeno verde cuesta 15 $ y para ser competitivo con el producido por los sistemas fósiles tendría que costar 2 $) y las cuestiones normativas:
La megatendecia de inversión en renta variable relacionada con el cambio climático es tremendamente atractiva. Para los inversores más moderados, recomiendo los fondos de inversión Nordea Global Climate and Environment y BlackRock Sustainable Energy. Para los más agresivos: BNP Paribas Energy Transition.
Quiero concluir la columna de esta semana recordando este famoso proverbio amerindio: "Sólo cuando el último árbol esté cortado; el último río, envenenado; y el último pez, atrapado, te darás cuenta de que no puedes comer dinero".