Recientemente, llegó a mis manos una comparativa por regiones elaborada por CaixaBank de los principales indicadores económicos de nuestro país. En la columna de hoy, extraeré algunos gráficos del informe y sintetizaré las principales ideas.

La Comunidad de Madrid lidera el ranking por tamaño de PIB. Su mayor crecimiento relativo ha permitido que la región en las dos últimas décadas haya aumentado su peso en el PIB español hasta el 19,3% frente al 17,7% del año 2000.

Ha mostrado un gran dinamismo demográfico en las últimas décadas gracias a los flujos migratorios del extranjero y de otras comunidades autónomas. Cuenta con 6,7 millones de habitantes, el 14,3% de la población española.

Madrid es una región con poco peso de las exportaciones de bienes en el PIB regional (13% versus 23,4% del promedio de España). A pesar de ello, es la segunda comunidad por volumen de exportaciones de bienes.

Veamos en este primer gráfico el peso de cada una de las comunidades autónomas en el PIB nacional (Madrid, Cataluña y Andalucía suponen conjuntamente más de la mitad del PIB de nuestro país):

El PIB per cápita madrileño asciende a 35.913 euros y se sitúa un 35,9% por encima de la media española. Es casi el doble que el extremeño:

En especialización productiva, Madrid destaca por un mayor peso relativo de los servicios ligados a la industria (40,6% vs. 28,2% de la media española) y por un peso muy reducido de las actividades agrícolas.

Gracias al turismo, Baleares y Canarias son líderes en términos relativos en cuanto al peso del "comercio, transporte, hostelería y ocio" en el PIB:

Precisamente, debido a ese mayor peso relativo, Baleares y Canarias fueron las comunidades más afectadas por la pandemia. Baleares perdió en 2020 casi la cuarta parte de su PIB:

Esa brutal caída del PIB balear va en línea con que este año seguramente sean las islas Gimnesias y Pitiusas las que más vayan a crecer en este primer año de recuperación:

Mi tierra de origen, Canarias, lidera el ranking del desempleo en nuestro país con casi una cuarta parte de la población activa en paro. Es 2,5 veces el nivel del País Vasco. La tasa de paro nacional está en torno al 15%:

Como decía la frase de apertura de este artículo, debemos ir abandonando lo viejo y abrazando lo nuevo, es decir, la innovación. Pero hay que hacerlo, no vale de nada decirlo simplemente. Henry Ford manifestó en su momento: "La mayoría de las personas gasta más tiempo y energía en hablar de los problemas que en afrontarlos".