"Si no has aprendido de la tristeza, no puedes apreciar la felicidad". (Nana Mouskouri).
Los economistas solemos debatir de vez en cuando si el bienestar de los países se debe medir por el PIB per cápita o por la felicidad individual experimentada. Lo cierto es que los países más ricos son casi siempre más felices.
En marzo, se publicó el Informe mundial de la felicidad 2022. Esta clasificación, que realiza Naciones Unidas, analiza seis variables claves para determinar el nivel de felicidad en 146 países del mundo: el PIB per cápita, el apoyo social, la esperanza de vida con buen estado de salud, la libertad de elección, la generosidad y la corrupción.
Que el ranking no tenga en cuenta el buen clima ni las horas de sol es lo que en mi opinión hace que los países escandinavos superen, por ejemplo, a España.
Como podemos ver en esta tabla de Statista, Finlandia lidera el listado, seguida de Dinamarca e Islandia. Otros dos países europeos, Suiza y Holanda, ocupan el cuarto y quinto puesto, respectivamente. España se encuentra en el puesto número 29, mientras que, en Latinoamérica, el país mejor situado es Costa Rica (puesto 23).
Los cinco países menos felices del mundo son Afganistán, el Líbano, Zimbabue, Ruanda y Botsuana. Por lo que respecta a América Latina, Venezuela (puesto 108) es el país peor situado de la región.
"Los tres avances más importantes fueron los de Serbia, Bulgaria y Rumania. Los retrocesos más fuertes se dieron en el Líbano, Venezuela y Afganistán", afirma el estudio, que se realiza desde hace una década. "La lección que se saca del informe, en estos diez años, es que la generosidad entre las personas y la honestidad de los gobiernos son cruciales para el bienestar":
Veamos un mapamundi de dicho informe elaborado por Visual Capitalist. Los números que se muestran representan los datos de la encuesta en cada país, a quienes se les pide que califiquen su bienestar subjetivo (puntuación de felicidad):
Veamos ahora el detalle por continentes, empezaremos por el más feliz (Europa) e iremos descendiendo hasta el más infeliz (África). En nuestra región, Ucrania ocupa triste y lógicamente el último puesto:
Estados Unidos y Canadá están empatados en felicidad, situándose ambos al mismo nivel que Alemania:
Sudamérica es la tercera región más feliz del mundo. En este caso, considero, debido a los cuatro años que viví allí, que el carácter optimista de la gente y sus respuestas subjetivas positivas han ayudado a este nivel en el ranking. Uruguay conserva su primer puesto como el país más feliz de la zona. Y Brasil, por ejemplo, experimenta curiosamente más felicidad que Portugal. ¿Es mejor vivir feliz en un país pobre o amargado en un país rico? Curiosidades de la vida:
China escaló 12 lugares en la clasificación mundial, lo que la convierte en el país que más ha mejorado en Asia oriental y Oceanía. El Gobierno chino identificó recientemente la “prosperidad común” como una prioridad principal y ha realizado numerosos cambios de política en un esfuerzo por combatir la desigualdad y erradicar la pobreza:
Durante los últimos dos años, el Líbano ha estado lidiando con una serie de crisis. En 2020, el coronavirus provocó una crisis que ha sido clasificada como una de las 10 crisis económicas más graves desde mediados del siglo XIX. Y el 4 de agosto de 2020, una explosión masiva de nitrato de amonio dejó en ruinas a la capital del país, Beirut:
África es la región más infeliz del mundo. Zimbabue sigue siendo el país más infeliz del área, ya que sigue lidiando con altos niveles de pobreza. En 2021, había 6,1 millones de personas que vivían por debajo del umbral internacional de la pobreza:
En mi opinión, las claves de la infelicidad son tres: vivir en el pasado, preocuparse por el futuro y compararse con los demás. Y es que la felicidad no va de lograr lo que quieres en cada momento, sino de valorar lo que tienes y de ser agradecido por ello.
Además, debemos elevarnos y esforzarnos en ser felices, ya que, según los expertos, el 50% de la felicidad es genético, un 10% depende de las circunstancias, pero el otro 40% se debe a la voluntad de tu mente.