Los miembros del FMI afirman que el conflicto en Ucrania ha exacerbado los efectos negativos de la pandemia, deteriorando las perspectivas de crecimiento económico, al mismo tiempo, aumentando las de la inflación. El principal problema está en que los elevados precios están afectando negativamente al comportamiento de los consumidores. El aumento de los tipos de interés, por el otro lado, sube el coste de la deuda.
La buena noticia es que no todo el mundo está en las mismas condiciones. Por ejemplo Israel. En el contexto de las crecientes presiones inflacionistas, los miembros del banco central votaron a favor de aumentar el tipo de interés básico en 40 puntos básicos hasta el 0,75%. Dado que la previsión de consenso era de una subida más moderada (hasta el 0,6%), un fortalecimiento del shekel frente al dólar parece una reacción lógica del mercado.
Cabe mencionar que, según los datos de la Oficina Central de Estadística, el IPC en Israel subió un 0,8% en abril de 2022. La tasa de inflación desde el inicio del año fue del 2,2% y la tasa de inflación de los últimos 12 meses alcanzó la marca más alta desde 2011, del 4%.
A pesar de todo, en abril Moody's elevó su perspectiva sobre Israel y reafirmó su calificación A1. Se observa que el programa de reformas del gobierno israelí y la expectativa de la agencia de una mayor reducción del ratio de deuda pública fueron los factores clave del cambio de perspectivas.
La semana pasada, la agencia de calificación Standard & Poor's dejó sin cambios la calificación favorable de Israel en AA- con perspectiva "estable". Según el Ministerio de Hacienda, la agencia citó los buenos resultados económicos de Israel el año pasado, una economía fuerte y una "estructura de deuda óptima". S&P dijo que espera que la economía de Israel crezca al 5,5% en 2022, tras un crecimiento de más del 8% en 2021, que batió las previsiones y fue el año con la mayor tasa de crecimiento registrada en Israel en 21 años. La OCDE, en sus previsiones económicas de diciembre de 2021, predijo que el crecimiento de Israel en 2022 se situaría en torno al 6,3%.
***Igor Kuchma es analista de Trading View