Ha llovido mucho desde que en 2015, Dimas Gimeno decidió dar entrada en el accionariado de El Corte Inglés a Hamad bin Jassim bin Jaber al Thani para hacer frente a la complicada situación financiera que atravesaba el grupo. Pero muchos recordarán cómo aquella operación fue el detonante final de una guerra familiar que unió a los Areces Galán con las hermanas Álvarez Guil y acabó costando la presidencia del grupo al sobrino de Isidoro Álvarez.
Siete años después, Marta Álvarez ha puesto fin a aquella aventura al acelerar la salida del jeque catarí ahora que El Corte Inglés cuenta con un nuevo socio de referencia que, además, es español: Mutua Madrileña.
La cadena de grandes almacenes anunció este martes un acuerdo con la sociedad de Al Thani, Primefin, para comprar la mitad de su participación en el capital de la compañía, que alcanzaba el 11,07%. Aunque el catarí conservará un 5,5% del capital, su sociedad saldrá del consejo de administración del grupo español y quedará como un mero actor financiero, en posición minoritaria, con una ventana para concluir su salida de aquí a 2025.
Marta Álvarez llegó a la presidencia de El Corte Inglés en el verano de 2019. Su bautismo de fuego fue la pandemia, pero superado aquel revés, la hija de Álvarez ha ido configurando su liderazgo. De hecho, sus 'hombres' para la transición ya han abandonado el grupo. No están con ella, ni Nuño de la Rosa, ni Víctor del Pozo.
[El bautismo de fuego de Marta Álvarez como presidenta]
También el histórico consejero Florencio Lasaga se despidió de la casa hace ya un año y al marcharse dejó la presidencia del Patronato de la Fundación Ramón Areces, que ahora ocupa Marta Álvarez por decisión unánime de todos los patronos.
Tras la marcha de sus viejas guardias, Álvarez ha encontrado como compañero de viaje a Ignacio Garralda, dentro de una alianza con la que Mutua Madrileña se ha hecho con un 8% de la cadena de grandes almacenes y fruto de la cual se potenciará el negocio de los seguros.
La entrada de Mutua en el accionariado y en el consejo de administración ha servido para zanjar un debate recurrente en los últimos años: cuánto vale El Corte Inglés.
[La gran jugada de Marta Álvarez y Garralda]
En esa reciente operación, se valoró la firma en unos 7.000 millones de euros, cifra que ahora ha servido para cerrar la recompra de la participación de Al Thani en la compañía por algo menos de 400 millones de euros.
En 2015, cuando el jeque entró en El Corte Inglés lo hizo a través de un préstamo participativo de 1.000 millones de euros que acabó ejecutando tres años después y le dio derecho a adquirir el 10% de la compañía. Es decir, siete años después, la operación se cierra para él con minusvalías, puesto que con los datos de entonces, la valoración rondaba los 10.000 millones de euros. Hay que tener en cuenta que de por medio ha habido una pandemia que ha golpeado con fuerza al sector de la distribución.
En todo caso, la posición financiera de la empresa que preside Álvarez es hoy más sólida que en 2015 y el nivel de deuda del grupo es el más bajo de los últimos 15 años.
También, la hoja de ruta de aquí a 2026 -horizonte de su plan estratégico- es mucho más clara y parece que por fin, se pondrá orden a sus activos inmobiliarios y se potenciará el canal digital. Dos asignaturas que el grupo tiene que aprobar antes de plantearse iniciar el siempre rumoreado y esperado proceso de salida a Bolsa.
El próximo 22 de julio, El Corte Inglés celebrará su Junta de Accionistas y formalizará todos estos cambios, siendo el más importante el de la entrada de Garralda en el consejo de administración.
Siete años después, Álvarez ha demostrado que su mandato es mucho más personalista de lo que muchos habían aventurado. Se ha hecho con el timón del grupo, introduciendo cambios claros en la gestión y no le ha temblado el pulso para deshacer las apuestas personales de su primo. La más icónica, la salida del jeque catarí.