Ilustración con el logo de Silicon Valley Bank.

Ilustración con el logo de Silicon Valley Bank. E. E. E. E.

BLUE MONDAYS

Riesgo de fuga de pasivo en los bancos

13 marzo, 2023 01:50

Los acontecimientos de la semana pasada en Estados Unidos han reavivado el temor a una eventual huida de depósitos en el sistema financiero. La realidad es que la rápida subida de tipos de interés alimenta la creencia de que el ciclo empieza a ser muy dañino para los bancos americanos y la prueba es la caída del decimoctavo banco por tamaño, con el consiguiente potencial contagio a sus homónimos europeos.

Los bancos de mayor tamaño actúan en un sistema de pacto de precios no explícito, ya que lo contrario sería ilegal. Básicamente se basa en copiar lo que la competencia hace y, si nadie hace nada, la colusión es un hecho. ¿Dónde se aprecia la colusión? En el hecho de que el coste del activo sube mucho más de lo que lo hace el pasivo y además de forma sospechosamente sincronizada.

Pero si un banco rompe la baraja de la remuneración del pasivo porque los tipos suben, los bancos que se descuelgan comercialmente sufren una salida de depósitos  hacia cuentas más remuneradas.

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Una forma de frenar el efecto llamada con tipos al alza sin tener que tocar el coste del pasivo es ofrecer alternativas, pero con algo más de riesgo. Por ejemplo, activos de muy corto plazo, como un fondo monetario. De esa forma, aunque el dinero sale del balance queda retenido por la entidad y suma a su cuenta de resultados vía comisiones.

En Europa, donde esto es más que evidente, hay una preocupación baja pero creciente. En Estados Unidos, donde el sistema es más competitivo se ha convertido en un gran problema cuando las entidades outsiders se saltan la norma y se vuelven agresivas. Todo esto lleva a que los bancos tienen que reponer el capital que están perdiendo de forma acelerada por la fuga de depósitos.

En el último año, los bancos comerciales norteamericanos han visto decrecer sus depósitos en un 2% que va en aumento, un porcentaje que no parecería muy llamativo si no fuera porque esa cifra equivale a un billón -europeo- de dólares.

Adicionalmente, la banca ya viene haciendo frente a otro problema también ocasionado por la subida de tipos de interés, como son las pérdidas de cartera derivadas por el brusco cambio en la política monetaria. Los tipos al alza impactan en el precio de los bonos que no se conservan a vencimiento.

Los bancos de mayor tamaño actúan en un sistema de pacto de precios no explícito, ya que lo contrario sería ilegal

Eso es lo que llevó el pasado jueves a SVB Financial a vender su cartera de deuda con unas pérdidas de casi 2.000 millones de dólares. La fuga de depósitos y las pérdidas deterioraron su posición de capital, por lo que el jueves intentó de forma desesperada ampliar capital con un fracaso que le ha llevado a tener que liquidar su balance, despedir a su plantillla y a infringir pérdidas a sus clientes.

Esta descripción es lo que secuencialmente se va a dar en multitud de bancos regionales, que no pueden absorber pérdidas y se verán abocados a ampliar capital, con el factor añadido de que muchos bancos no tienen estos depósitos garantizados, lo que supone infringir una pérdida equivalente a sus clientes.

¿Es sistémico el riesgo? Ciertamente es muy elevado. Los niveles de capital exigidos por los reguladores no son los de 2008, pero aferrarse a ese dato no está exento de cierta complacencia. El ciclo es malo, eso es un hecho, y la inflación sigue sin aflojar, por lo que los tipos deberían seguir subiendo.

Lo que es preocupante es intentar desgranar, de nuevo, el riesgo moral (moral hazard) que afronta la Fed. Lo que va a ser divertido es ver cómo encaja un rescate de bancos y una inyección masiva de liquidez con la inflación descontrolada.

Los niveles de capital exigidos por los reguladores no son los de 2008, pero aferrarse a ese dato no está exento de cierta complacencia

Los bancos que ya vienen frenando el grifo del crédito endureciendo las condiciones de financiación van a drenar al sistema aún más trasladando tensiones de corto plazo a las empresas. Esa falta de confianza obligará a los bancos centrales a ejercer su condición de prestamista de última instancia en el peor momento posible.

La prudencia me hace contener el mensaje, pero para los que no vivieron tan de cerca la crisis desatada en 2008 las pautas son idénticas solo que en un contexto económico mucho peor por la deuda acumulada y la inflación.

Si algo distingue a los bancos es su condición de cajas negras. Un día es una salida de depósitos, otro es un fondo con pérdidas mastodónticas que se cierra y otro es un default en su deuda. Y como las hemos tenido de todos los colores, e insisto en la prudencia, vigile lo que ocurre porque esta película ya la hemos visto. Yo por lo menos.

Francisco de la Torre, autor de '¿Y esto quién lo paga?', en la redacción de EL ESPAÑOL.

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