En el 2001, desde la Fundación Independiente, que presidía, después de varios importantes estudios, tomamos el acuerdo de iniciar el largo, difícil y complejo camino para que España y los españoles pudieran disfrutar de unos horarios más humanos, racionales, eficaces y europeos.

Nuestros singulares horarios tienen mucha relación con que actualmente España sea líder europeo en baja natalidad, separaciones matrimoniales y fracaso escolar. Tres temas muy graves que marcan nuestro futuro. Nuestros horarios dificultan la igualdad, la conciliación, la corresponsabilidad, la productividad… a los españoles en general, y muy especialmente a las mujeres.

Considero que el balance de estos 20 años, intensamente vividos, es positivo. Con objetividad, pienso que cuantos hemos "luchado" por unos horarios más humanos:

- Hemos contribuido a que la ciudadanía sea cada vez más consciente de que conceptos tan importantes e imprescindibles como conciliación, igualdad, corresponsabilldad, productividad, calidad de vida... precisan ineludiblemente de horarios racionales.

- Hemos ayudado a que cada día se hable más sobre los horarios en los hogares: en los medios de comunicación, en los centros de trabajo, en las negociaciones de los convenios, en el debate político...

- Hemos colaborado a obtener en el mundo empresarial: una mayor productividad y eficacia, reducir gastos y conseguir la satisfacción de los trabajadores, especialmente las mujeres.

Nuestros singulares horarios tienen mucha relación con que actualmente España sea líder europeo en baja natalidad, separaciones matrimoniales y fracaso escolar

En el 2003, hace 20 años, constituimos la Comisión Nacional para la Racionalización de los Horarios Españoles, y posteriormente ARHOE, para impulsar cuatro objetivos concretos y claros:

- Que España adopte el huso horario que le corresponde, el del meridiano de Greenwich, y abandone el de Berlín, que lo mantenemos desde la Segunda Guerra Mundial.

- Que las Administraciones, empezando por el Gobierno de España, cumplan el Plan Concilia de 2005 y la resolución de diciembre de 2012 de la Secretaría de Estado de las Administraciones Públicas. La jornada laboral debe finalizar a las 18:00h.

- Que las televisiones públicas, especialmente, y las privadas finalicen su prime time a las 23:00h, al igual que los espectáculos.

- Que la igualdad, la conciliación y la corresponsabilidad se conviertan en una realidad inmediata.

Somos muchos y muchas las que en España llevamos años luchando por estos objetivos, compartiéndolos en el Congreso de los Diputados, al Gobierno, a todos los partidos políticos, a los máximos representantes empresariales y sindicales, directivos de la sociedad civil y con la Casa Real. Esperemos que ahora, con la publicación de las conclusiones del estudio de la Ley de los Usos del Tiempo y Racionalización Horaria, se dé el impulso definitivo para que en la próxima legislatura se apruebe la necesaria y urgente Ley de Usos del Tiempo en España.

Tengo la plena seguridad que, con la adopción de las cuatro medidas expuestas, los españoles, y muy especialmente las españolas, podrán disfrutar de una vida más plena, satisfactoria y feliz. Hagámoslo posible. Venzamos, con nuestras justas razones, a los que se oponen a ellas.

*** Ignacio Buqueras y Bach es académico, empresario, presidente de Honor de la Comisión Nacional para la Racionalización de los Horarios Españoles y ARHOE, y miembro del Comité de Expertos de la Time Use Initiative.