La Reserva Federal prosigue su lucha contra la inflación, pero el sentimiento alcista en los mercados se mantiene; la actividad empresarial en el sector manufacturero desacelera, aún así los analistas de Goldman han elevado la previsión del PIB de Estados Unidos para el segundo trimestre al 2,2% (respecto al trimestro anterior) desde el 1,8% anterior.
¿Qué está pasando?
¿Acaso los banqueros decidieron ayudar a impulsar el S&P 500 por encima de los 4.500 puntos con su propio esfuerzo? Puede que haya habido intentos de manipulación, pero la subida del martes se vio respaldada por unos sólidos datos de construcción de viviendas y un repunte de la confianza de los consumidores.
¿De dónde viene el optimismo?
De la desaceleración de la subida de precios y un mercado laboral resiliente. Por ejemplo, según el calendario económico, las expectativas de inflación de los consumidores para los próximos 12 meses han caído hasta el 6%, el nivel más bajo desde diciembre de 2020.
Las expectativas de inflación de los consumidores para los próximos 12 meses han caído hasta el 6%
Además, aunque las solicitudes de subsidio de desempleo en Estados Unidos han aumentado por tercera semana consecutiva, no se trata de ninguna catástrofe todavía. Por último, el aumento de los costes de los préstamos no está causando problemas significativos.
En primer lugar, la mayoría de los hogares han refinanciado sus hipotecas durante la pandemia. En segundo lugar, los consumidores no se han endeudado excesivamente en los dos últimos años.
Según un estudio The Wall Street Journal, en el primer trimestre los pagos del servicio de la deuda de los hogares ascendieron al 9,6% de la renta personal disponible, el nivel más bajo registrado desde 1980.
¿Significa esto que los economistas se han equivocado una vez más y que no habrá recesión? Se necesita tiempo para que unos tipos de interés más altos repercutan plenamente en la economía y enfríen el crecimiento y la inflación.
Además, unos tipos más altos pueden frenar el crecimiento de formas no evidentes, como obligar a los empresarios a recortar las vacantes o a las empresas a abandonar los planes de expansión.
Dicho esto, la situación de la primera economía mundial no es tan halagüeña como parece.
***Igor Kuchma es analista de Trading View.