Los problemas nunca vienen solos, pero ahora Europa se ha visto completamente rodeada de ellos, y es poco probable que pueda salir de la desventajosa situación por sus propios medios.
Si antes parecía que el problema de la inflación se resolvería pronto, con la creciente tensión en el mar Rojo y las interrupciones de la cadena de suministro, las perspectivas han empeorado.
Esto no significa necesariamente que se vaya a repetir la situación de 2021 con la subida generalizada de los precios, pero la tendencia desinflacionista puede ralentizarse.
Dicho esto, si el conflicto en la región se agrava aún más (por ejemplo, enfrentamientos directos con Irán), habrá que posponer la bajada de los tipos de interés.
¿Puede la economía soportar una política monetaria restrictiva durante más tiempo?
Si el conflicto en la región se agrava aún más (por ejemplo, enfrentamientos directos con Irán), habrá que posponer la bajada de los tipos de interés
Es probable que se produzcan más quiebras empresariales debido a la elevada carga de la deuda. En el conjunto del sistema, sin embargo, las perspectivas son ligeramente más optimistas.
Siempre que no se produzcan nuevos choques en el mercado de la energía, no se espera una recesión en toda regla, sino un débil crecimiento de alrededor del 0,6%. El FMI, por su parte, espera un 1,2%.
Sin embargo, existe otro riesgo importante que podría afectar a las perspectivas económicas de la UE: un giro hacia una confrontación comercial abierta con China.
La causa de la tensión entre las partes fue un desequilibrio comercial de más de 200.000 millones de euros, causado, según ellos, por la exclusión de los productos europeos del mercado chino.
Hablando de posibles medidas, la UE podría imponer aranceles a los productos chinos, presentando denuncias ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) por prácticas comerciales desleales.
Existe otro riesgo importante que podría afectar a las perspectivas económicas de la UE: un giro hacia una confrontación comercial abierta con China
El país asiático no tardará en responder, en primer lugar, cerrando también el mercado a las empresas europeas y, en segundo lugar, restringiendo aún más la exportación de metales raros.
¿Hasta qué punto es probable el inicio de una guerra comercial?
Dado que (A) las autoridades chinas iniciaron el 5 de enero una investigación antidumping sobre las importaciones de brandy de la UE y (B) en Europa se está elaborando un plan para proteger las industrias críticas del control de las inversiones chinas, los riesgos son bastante reales.
Pero, ¿por qué entonces el Stoxx 600 no reccionaante una perspectiva negativa?
Por un lado, por las expectativas de que el cambio de política del BCE resuelva todos los problemas. Por otro, porque los inversores están aquejados por el síndrome FOMO.
Es difícil decir cuándo se producirá la constatación de los problemas acumulados, pero debemos estar preparados para posibles cambios bruscos en el sentimiento bursátil.
En este sentido, podría ser útil seguir los datos técnicos como indicador de volumen y, en general, estar atentos a las cifras macroeconómicas y a los discursos de los miembros del BCE.
***Igor Kuchma es analista de Trading View.