Un torrente de información para recuperar el impulso ESG en las Bolsas

Sin embargo, su ascenso no ha sido lineal. El ímpetu de los últimos años ha dado ahora paso a una fase de debate sobre la velocidad y el alcance en la implementación de estos criterios, llegando incluso a influir en un consenso que hace no tanto parecía unánime. Lo que reflejan estas conversaciones es que se puede haber desviado el rumbo en la discusión sobre la sostenibilidad ya que el camino no ha resultado ser ni tan claro ni tan lineal como se percibía en el momento de fijar los objetivos.  

Estas conversaciones deberían hacer saltar las alarmas y fomentar el impulso de medidas, tanto nuevas como existentes, que pongan en valor la necesidad de apostar por el ESG como uno de los ejes de la actividad económica, por lo que es obligación de todos los agentes de la industria el identificar las áreas en las que surgen las ineficiencias que alimentan la crítica de este progreso. Al final, lo que se refleja es que se tiene claro el final al que se quiere llegar, pero que no se ha dado todavía con la mejor manera de alcanzarlo, por lo que es fundamental identificar las áreas que ayuden a recuperar el rumbo más acertado. 

Y una de estas áreas es la de la información. Ya en el apogeo del discurso ESG se alertaba de la necesidad de reforzar y armonizar la información disponible en este ámbito para evitar que la proliferación de protocolos, códigos y lenguajes de reporting creara un ecosistema de ruido informativo que lastrase -e incluso comprometiera- la promoción de estas prácticas. 

Este es un riesgo que siempre ha estado presente, por eso en Euronext decidimos lanzar herramientas para mitigarlo, como es el caso de MyESG en 2023. El creciente valor de estos datos, que tradicionalmente no se tenían tan en cuenta por los inversores, han abierto ahora una ventana a nuevas oportunidades e innovaciones que, como es el caso de MyESG Profile, democratizan la disponibilidad de esta información para quienes no pueden acceder a los grandes proveedores de datos institucionales.

En el apogeo del discurso ESG se alertaba de la necesidad de reforzar y armonizar la información disponible en este ámbito para evitar que la proliferación de protocolos

Esta funcionalidad permite que las empresas que cotizan en las Bolsas operadas por Euronext, entre las que se encuentran algunas de las principales del continente, pudiesen compartir información ESG en un mismo lenguaje y de una manera muy sencilla, lo que facilita la comparativa entre empresas, ya sea para utilidad de los inversores o de las mismas empresas implicadas. 

La buena acogida de la iniciativa se ha traducido en la publicación de casi 100.000 fuentes de datos correspondientes al periodo entre 2020 y 2023, desde los que se han establecido 50 indicadores cualitativos que encajan con los lenguajes CSRD, SFDR y la taxonomía europea. Se ha creado una red de información en la que participan más 1.700 empresas cotizadas y que ponen al servicio de la comunidad inversora una ingente cantidad de información cuyo acceso es realmente sencillo. 

Los grandes teóricos de los mercados financieros han puesto siempre el acento en el valor de la información, que no deja de ser el elemento principal que se refleja en el valor de cotización de las empresas. Por eso en Euronext, en donde contamos con más de 1.900 emisores, consideramos que la información tiene que ocupar un papel central en toda nuestra operativa, especialmente en coyunturas tan cambiantes como la actual, en la que la constante trasformación del entorno obliga muchas veces a prestar más atención al recorrido que lleva a los objetivos que a los objetivos en sí mismos. Son estos momentos los que desencadenan las innovaciones que marcarán el rumbo del impulso ESG. 

***  Susana de Antonio es responsable de Euronext en España.