Estamos presenciando numerosas manifestaciones y huelgas en centros de bachillerato, derivadas de la falta de claridad sobre la nueva prueba de acceso a la universidad, denominada PAU, que entra en vigor en este curso académico 2024-2025. A estas alturas, los estudiantes aún no saben cómo serán evaluados.
Las decisiones que se toman en los estudios a partir de los 16 años, cuando la formación deja de ser obligatoria en España, influyen enormemente en el futuro profesional, la calidad del empleo y la remuneración salarial que una persona percibirá.
Numerosos estudios demuestran una clara conexión entre la educación recibida, la tasa de paro, la productividad laboral, la calidad en el empleo y la remuneración salarial.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), la tasa de desempleo para personas sin estudios puede superar el 30%, mientras que la tasa de paro para personas con estudios de postgrado en España, es decir el extremo opuesto en nivel de estudios, suele estar por debajo del 10%, y en muchos casos, puede acercarse al 5% o incluso ser tasa cero. Este bajo nivel de desempleo se debe a la alta demanda de profesionales cualificados en el mercado laboral, especialmente en sectores como finanzas, tecnología y negocios.
Además, la formación especializada genera mayores oportunidades de ascenso y estabilidad laboral. Según un estudio elaborado por el área de Economía Aplicada de Afi, el 30% de los egresados de posgrados especializados en Afi Escuela ocupa posiciones directivas, el doble que otros profesionales con características similares.
La formación especializada genera mayores oportunidades de ascenso y estabilidad laboral
Otra tendencia observada en los últimos años es el aumento de alumnos matriculados en estudios de formación profesional, especialmente de grado superior, donde las tasas de desempleo suelen estar en torno al 10-15% por debajo de los alumnos con formación secundaria sin especialización alguna. Estas cifras pueden reducirse a tasas en torno al 5% o incluso cero, tasas similares a los alumnos de postgrados en especialidades de Formación Profesional en el área de Tecnología, tales como Desarrollo de Aplicaciones y Sistemas de Información y Redes. Este bajo nivel de desempleo se debe a la alta demanda de profesionales en el sector tecnológico, impulsada por la digitalización y la transformación digital de las empresas.
La educación también impacta en los salarios percibidos por los profesionales. Según el mencionado estudio de Afi sobre el impacto de la formación recibida por los egresados de Afi Escuela, los antiguos alumnos de posgrados especializados perciben un salario bruto anual casi cinco veces superior al salario mínimo interprofesional, muy por encima de la media salarial en España. Esto contrasta claramente con el salario percibido por ciudadanos sin estudios, cuyo salario está entre los 15.000 y 20.000 euros brutos anuales.
Llama la atención que el salario de los titulados en Formación Profesional (FP) en el área de Tecnología en España puede variar considerablemente según la especialidad, la experiencia y la ubicación geográfica, alcanzando cifras superiores al salario medio en nuestro país. En general, los salarios para estos profesionales suelen ser competitivos debido a la alta demanda en el sector.
Llama la atención que el salario de los titulados en Formación Profesional (FP) en el área de Tecnología en España puede variar considerablemente según la especialidad, la experiencia y la ubicación geográfica, alcanzando cifras superiores al salario medio en nuestro país
Así los titulados en desarrollos de software pueden tener un salario inicial que oscila entre 25.000 y 35.000 euros anuales, y con experiencia, este puede aumentar a 40.000 euros o más. Los profesionales en redes y ciberseguridad pueden comenzar con salarios en el rango de 25.000 a 35.000 euros, y con experiencia, pueden superar los 50.000 euros.
Ahondando de manera más específica en el tema, el estudio "Future of Jobs Report 2023" elaborado por el World Economic Forum, indica que se anticipa un cambio estructural en el mercado laboral que afectará aproximadamente al 23% de los empleos en los próximos cinco años. Esto se traduce en una mezcla de empleos emergentes que se crearán y empleos en declive que desaparecerán, lo que refleja una rotación significativa en la naturaleza de los trabajos tal como los conocemos.
Este cambio implica que, aunque algunos empleos desaparecerán, otros nuevos surgirán, lo que requerirá adaptaciones en las habilidades y competencias de la fuerza laboral. Según dicho estudio se proyecta que en los próximos cinco años se perderán aproximadamente 83 millones de empleos. Al mismo tiempo, se espera que se creen alrededor de 69 millones de empleos, lo que resulta en una rotación estructural del mercado laboral de 152 millones de empleos.
En definitiva, en el contexto actual, la formación especializada, altamente demandada por las empresas, genera mayor estabilidad laboral, mejores empleos y salarios. Ya no depende solo del nivel de estudios, sino que el área de conocimiento adquiere una relevancia especial en la coyuntura actual.
*** Mónica Guardado es directora general de Afi Escuela.