Imagen general de Zaragoza.

Imagen general de Zaragoza. E. E.

Opinión

El efecto de una huelga de alquileres sobre el mercado inmobiliario

Arantxa Goenaga
Publicada

El tema de los alquileres en España es uno de los más comentados y sobre el que todos tenemos opinión, pero parece que algunas más acertadas que otras. Antes de entrar en la propuesta que se oye últimamente de hacer una huelga de inquilinos en la que dejarían de pagar la renta, que ya adelanto que causaría un impacto nefasto, creo que es necesario poner el tema en contexto.

La primera cuestión que debemos abordar es qué mercado inmobiliario tenemos, si uno dominado por unos grandes tenedores que tienen la propiedad de casi la totalidad del parque inmobiliario, como puede suceder, por ejemplo, en Austria, que no es el caso, o bien un sistema de pequeños propietarios en el que la mayoría de las propiedades son de particulares que tienen una segunda propiedad para alquilar y así complementar su pensión, sueldo o bien buscan tener una seguridad de una renta cuando ya no trabajen.

Efectivamente, estamos en este segundo modelo en el que los propietarios son particulares que buscan ayudar o complementar su medio de vida actual o en el futuro.

Tenemos un sistema de pequeños propietarios en el que la mayoría de las propiedades son de particulares

La segunda cuestión que debemos poner de relieve es que la normativa arrendaticia ya no mantiene un equilibrio entre las partes y los propietarios cada vez tienen más obligaciones no solo burocráticas sino también de limitaciones de renta o de su actualización.

Esto ha llevado a que muchos propietarios han dejado de ver seguro o rentable el mercado inmobiliario de alquiler de vivienda habitual y se está tendiendo a dejar de alquilar o bien a acudir al alquiler turístico o de temporada.

Al mercado inmobiliario le están imponiendo una serie de restricciones e imposiciones que hace que cada vez esté más tensionado y los propietarios duden en continuar en el mismo.

Por si fuera poco, con todos los antecedentes que estamos describiendo, nos encontramos que ahora se está defendiendo una huelga en la que los arrendatarios dejen de pagar la renta.

Al mercado inmobiliario se le están poniendo una serie de restricciones e imposiciones que hacen que cada vez esté más tensionado 

Es evidente que la primera consecuencia de esta huelga será que los propietarios puedan resolver el contrato, dado que es una causa de finalización del mismo, y si el arrendatario no hace entrega de la vivienda pueden interponer un procedimiento judicial para que se ejecute, así como que se les pague la renta durante todo el tiempo que el arrendatario siga dentro de la misma.

Consecuencia inmediata de lo anterior es que se colapsaran los juzgados y que se reducirá la oferta de pisos para alquilar, ¿quién va a poner un piso suyo en alquiler con esta amenaza de huelga?

Está claro que, de inicio, el perjudicado será el propietario porque dejará de cobrar la renta y deberá iniciar un procedimiento judicial. Pero los que realmente van a sufrir las consecuencias de esta huelga serán los propios arrendatarios que se verán envueltos en un procedimiento judicial que les obligara a pagarla deuda y que puede finalizar con unas costas judiciales y con la finalización de su contrato.

Ellos serán los perjudicados directos, pero indirectamente también lo serán el resto de los arrendatarios y el mercado inmobiliario en general porque llevara a una reducción de la oferta inmobiliaria para alquilar.

Es decir, su efecto va a ser el contrario del que se supone que pretenden. Será más difícil alquilar y eso hará que los precios se incrementen todavía más.

El contrato de arrendamiento conlleva una serie de obligaciones y derechos para ambas partes que son consecuencia una de la otra. Mientras el dueño cede el uso de la vivienda, el inquilino debe pagar la renta.

Esta reciprocidad se está ignorando totalmente y pretenden trasladar a los propietarios una responsabilidad que no les corresponde.

Por poner un ejemplo. Es lo mismo que si a un restaurante le dices que el precio de su menú es el que establece el Estado o bien que se convoca una huelga y los clientes que vayan no pagarán la cuenta. Sería injusto, ¿verdad?. O bien que la empresa en la que trabajes se declare en huelga y decida no pagarte el sueldo, pero tú estás obligado a trabajar. ¿A que tampoco tendría sentido?

El efecto de la huelga va a ser el contrario al que se busca y va a perjudicar a quienes quieren alquilar

Si el problema es que no hay alquiler social o asequible para las personas vulnerables, a quien hay que exigir al Estado, no a los particulares que lo que buscan es tener un mejor sueldo o una mejor pensión.

Estas noticias sobre huelgas lo único que llevan es a inestabilizar el mercado inmobiliario, provocar que los que estén dentro de el se planteen salir y los que no han entrado no quieran hacerlo. Como decimos provoca el efecto contrario porque perjudican a quien mas lo necesita y castiga a aquel que necesita que los alquileres sean mas bajos.

Un principio económico básico es que cuando hay más oferta el precio baja porque los que demandan tienen donde escoger. Es evidente que los que proclaman estas huelgas o no entienden cómo funcionan la economía y el mercado inmobiliario o bien que no buscan beneficiarlo, como dicen, sino revolver el mercado para que todo sea más confuso.

Basta ya de perjudicar el sector inmobiliario. Si quieren que todo el mundo tenga una vivienda digna esta no es la vía. Al revés, lleva a que cada vez sea más difícil. Pongamos un poco de sentido común y busquemos hacer las cosas bien, que nos beneficiará.

**Arantxa Goenaga es abogada y socia de AF LEGIS.