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Con el sorteo extraordinario de la Lotería de Navidad 2024, queda oficialmente inaugurada en España la verdadera época navideña. Un sorteo que de nuevo ha devuelto la ilusión a muchos españoles, tanto a quienes han soñado con tener alguno de los número premiados, como también para aquellos que este año han sido agraciados con alguno de los grandes y pequeños premios

Precisamente para aquellos más afortunados que hayan tenido la suerte de ganar esos grandes premios y ya estén pensando en cobrar su dinero, pero que además hayan compartido su décimo con familiares, amigos y personas más allegadas, es importante que tengan en cuenta una serie de consejos a la hora de cobrarlo. 

Y es que, aunque el primer impulso que podamos tener sea el de dirigirse al banco correspondiente para ello, la realidad es que si se trata de un gran premio estará sujeto a impuestos y además, si se trata de un décimo compartido, podríamos estar asumiendo gran parte de esos impuestos y recibir menos dinero si acude una sola persona a cobrarlo.

En este sentido, es recomendable evitar este típico error y optar por identificar en el banco a cada ganador y su porcentaje de participación. De esta forma, la entidad bancaria podrá repartir el premio entre los agraciados. Para ello, es necesario hacer un documento en el que todos los participantes firman como poseedores del porcentaje correspondiente de ese décimo y a cada uno se le transfiere la parte del premio con la tasa del 20% de Hacienda ya restada.

En el caso de que solo uno de los participantes decida cobrar el premio y posteriormente repartirlo, esto podría ser considerado como donación y entonces habría que añadir el impuesto de donaciones. Por lo que identificar a cada ganador y que el propio banco reparta las cantidades es la forma más rentable y sencilla, ya que maximiza la exención por IRPF, evita el Impuesto de Donaciones y simplifica el trámite fiscal.

Qué pasa con los premios inferiores a 40.000 euros

En el caso de que el premio sea inferior a 40.000 euros, este no tributa a Hacienda. Esto se debe a que a partir de esta cantidad es obligatorio tributar el 20% de nuestras ganancias a Hacienda, pero por debajo no. 

Así que si el décimo se comparte entre varias personas y el premio total es menor a 40.000 euros, cada persona recibe su parte sin tener que pagar impuestos, siempre que pueda justificar que el décimo era compartido desde el principio.

En el caso de que no exista evidencia de que el décimo era compartido, Hacienda podría interpretar el reparto como una donación, aplicando el Impuesto de Donaciones, aunque el décimo esté exento de IRPF.

Este impuesto depende de cada comunidad autónoma y el grado de parentesco entre las distintas partes, pero sí que podría generar un coste extra innecesario. Para evitarlo la clave está en asegurarse de que todos los participantes estén identificados desde el inicio con DNI y porcentajes de participación, para ello podéis redactar un acuerdo privado por escrito para evitar posibles conflictos o interpretaciones de Hacienda.

En el caso de que ya hayas cobrado el premio como único titular y el décimo sea compartido, lo mejor es transferir el dinero a los demás participantes con algún concepto claro como "reparto de premio compartido" para justificarlo en el caso de una revisión futura.