César, el místico de Villalbilla acusado de la muerte de Raquel en un zulo: 'experto' en medicina alternativa y escritor
Firmó 7 libros bajo el seudónimo Ramaathis-Mam. "Era un hombre raro que siempre que caminaba iba murmurando, como rezando", dicen sus vecinos.
12 septiembre, 2024 15:47Extraño. Raro. Hermético. Son algunos de los adjetivos que utilizan los vecinos de Villalbilla para describir a César Suárez, vecino de esta pequeña y tranquila localidad madrileña de poco más de 13.000 habitantes. Ninguno de ellos imaginaba que él y su pareja, Raquel, se convertirían en la comidilla de la avenida Romero a razón de un truculento suceso: el pasado 31 de agosto ella "desapareció" tras ir a visitar a su familia a Griñón. Su propio marido avisó a las autoridades y denunció su ausencia. Diez días después, ella apareció muerta en un zulo sin ventanas en su casa, con espuma en la boca y rodeada de blísteres de pastillas, y César, principal sospechoso, fue detenido y enviado a prisión provisional sin fianza.
A Suárez se le investiga por una supuesta comisión de un delito de homicidio, pero el acusado ha negado ante el juez que él matara a su esposa. De hecho, el cuerpo de Raquel, de 54 años, no mostraba signos de violencia cuando el pasado domingo las autoridades irrumpieron en su domicilio –previa orden judicial– en la urbanización El Robledal. El informe preliminar de la autopsia tampoco ha hallado signos de violencia externos. A Suárez, además, se le señala por un posible delito de inducción al suicidio, y las autoridades están a la espera del análisis toxicológico del cuerpo.
"No nos lo podemos creer. ¡Qué mal cuerpo! Se les veía pasear juntos por las calles. Él siempre llevaba una bolsa de plástico en la mano y una especie de rosario, pero como budista. Cuando caminaba siempre iba murmurando, como si fuera rezando", asegura Natividad, vecina de Villalbilla, una de las pocas personas que se cruzaba con César y Raquel cuando ellos, nada dados a socializar, salían a pasear por las mañanas. "Ella me parecía normal, saludaba y sonreía, pero no hablaba demasiado; su trato era sólo de hola y adiós", asegura la misma persona. "Alguna vez se dejaban la puerta abierta de su casa y les buscaba para avisarlos, pero más allá de eso no se relacionaban mucho".
"Ella era muy apagadita; tenía una cara triste. Hablaba como tímida", explican Angelines y Santiago, vecinos de la pareja, también en shock tras conocer el suceso. La extraña actitud de Raquel podría responder a su historial de problemas mentales. Fuentes próximas a la investigación han señalado que ella ya había tenido dos intentos de suicidio. Cuando César Suárez denunció su desaparición, alertó a las autoridades de que en mayo había sido ingresada tras haberse atiborrado con al menos 60 pastillas.
Otros residentes de la zona consultados por EL ESPAÑOL narran que ambos vivían "aislados del resto de vecinos" y que "cuando salían a pasear, él llevaba como un rosario en la mano, le daba vueltas con el dedo y rezaba en voz alta. Desde la casa de al lado se les escuchaba dando golpes, con cuencos y con platillos. Eran realmente devotos".
Ni César, de 60 años, ni Raquel, de 54, figuraban en el sistema VioGén. No tenían hijos en común y él ya había estado casado con otra pareja en el pasado. Ambos se habían comprado su casa acomodada de Villalbilla poco antes de la pandemia.
Su trayectoria espiritual
"Él siempre llevaba un semblante serio, como de no querer hablar. Era muy extraño", aseguran las fuentes consultadas por este diario, quienes también relatan que "tenía un ambiente de intelectual" y que les sonaba que había publicado algún libro. Efectivamente, en su perfil de LinkedIn, además de jefe de almacén en la cadena Hot Depot, figura como autor de libros en la Editorial Amatista.
Bajo el seudónimo Ramaathis-Mam, firmó ensayos como Diálogos con el tiempo, El lenguaje mágico de la vida o Revelaciones extraterrestres. En su perfil profesional, César Suárez también asegura ser experto en terapias alternativas, ya que cursó un máster en Medicina Natural en la Open University of Advanced Sciences de Miami, en Estados Unidos, donde también completó un máster en Pedagogía.
Su biografía en Amatista da buena cuenta de la profunda dimensión espiritual de César Suárez. "Nacido en Mieres. Cuando tenía 10 años, estaba tan deprimido por tener malas notas que estaba pensando seriamente en el suicidio; entonces, unos seres se le aparecieron y le dijeron que no debía deprimirse por las notas, pues esas enseñanzas no tenían importancia para el desarrollo del alma y que él tenía que cumplir una misión para el desarrollo de la humanidad".
"A los 27 se le volvieron a aparecer los mismos seres, diciéndole que debería ir a la India para su desarrollo espiritual; esto le conmocionó tanto que decidió dar un giro radical a su vida, dirigiéndose a ese país y pasando 11 años en un templo bajo el entrenamiento de un maestro espiritual que decía que estaba aguardando su llegada".
Abrir su página web personal, Atlantis Angelis, inactiva desde el 9 de agosto de 2024, implica sumergirse en un universo paralelo. "Este es un portal para que la Voz del Universo entre en tu corazón y despierte el hálito divino que está esperando ser activado. Para ello, la Jerarquía ha preparado a Ramaathis-Mam, un canal múltiple, para transmitir comunicados periódicos, libros, música, meditaciones, arte transgeométrico, seminarios...", reza el comunicado de bienvenida. "Paséate por este portal y recibe de él los códigos vibratorios que en estos momentos más necesitas". Tal y como indica su blog, durante un tiempo Ramaathis-Mam promocionó sesiones espirituales privadas en su casa.
Fuentes cercanas a la investigación confirman que la identidad de César Suárez se corresponde con la de Ramaathis-Mam y que tanto él como su esposa eran feligreses de los Hare Krishna, la famosa entidad religiosa de origen hindú cuya comunidad más grande se encuentra en Brihuega, Guadalajara. Aunque no estaban asociados directamente a ellos, sí que llevaban los últimos dos años frecuentando el centro del movimiento en Madrid "aunque llevaban varios meses desvinculados".
El seudónimo con el Suárez firma los libros –algunos de ellos con varias ediciones y traducidos a idiomas como el polaco–, fue el que le puso su guía espiritual: Ramaathis Mam. Sin embargo, fuentes cercanas al grupo aseguran que ese no tiene nada que ver con su culto y desconocen qué significa.
"Desde la Asociación para Conciencia de Krishna queremos dejar claro que el posicionamiento de nuestra asociación ha sido, es y siempre será por el derecho de las personas a vivir una vida libre de violencia y por la erradicación de cualquier forma de violencia de género", ha asegurado el grupo. "Manifestamos nuestro completo rechazo a los actos que se le imputan al sospechoso y queremos dejar claro que esta persona no forma parte de nuestra institución aunque asistiera de forma esporádica a algunas de nuestras actividades".
Una extraña desaparición
Fue el pasado 31 de agosto cuando César Suárez interpuso una denuncia por la desaparición de su esposa, Raquel, en el cuartel de la Guardia Civil. Según explicó, ella había salido de Villalbilla para visitar a su madre, que vive en Griñón, a unos 75 kilómetros del pueblo, pero no había regresado tal y como estaba previsto.
La Guardia Civil tramitó la denuncia por desaparición, la envió al Ministerio de Interior y esta, a su vez, a SOS Desaparecidos, que dio la señal de alarma. Tras más de una semana de pesquisas, las autoridades policiales abrieron una investigación y solicitaron una orden judicial para poder registrar el domicilio conyugal, ubicado en el número 15 de la avenida del Romero, en la urbanización El Robledal, en Villalbilla (Madrid).
Al entrar en la casa, encontraron la terrible escena: Raquel estaba muerta en una habitación sin ventanas, tumbada en la cama y con espuma en la boca. También había blísteres con pastillas a su lado. César, que en ese momento no estaba en la casa, fue detenido horas después. "La Guardia Civil definió la habitación en la que vivía como un zulo. Al parecer, ella era muy aprensiva y no soportaba los ruidos a la hora de dormir, por eso dormía allí", comenta otro vecino.