El sector del taxi se ha manifestado este miércoles por las calles de Madrid al considerar una "aberración" la modificación de la Ley de Transportes aprobada por el Consejo de Gobierno y que este jueves vota la Asamblea de Madrid.
La Federación Profesional del Taxi de Madrid (FPTM) cree que el ejecutivo de Isabel Díaz Ayuso busca con esta regulación de la situación de los Vehículos de Transporte con Conductores (VTC) "acabar a medio plazo con el taxi" y critica además su tramitación por "lectura única", imposibilitando al resto de grupos políticos alcanzar "un texto más o menos consensuado".
La ley madrileña quiere contrarrestar la exigencia del conocido como 'decreto Ábalos', aprobado en 2018, que fijaba que los VTC no podrían ejercer su actividad a partir de octubre de 2022 si las autonomías no los regulaban.
Para la FPTM, convocante de la protesta, la norma es un "traje a medida para cuatro oportunistas" que cuentan con "miles de autorizaciones" y que están dando un servicio "como si el taxi se tratara", pero sin sus "obligaciones e instrucciones". "Si pretenden que se pueda convivir, deben diferenciarse", recalca.
Un VTC por 30 taxis
A las 10 horas la caravana de taxis llegaba ya a la Plaza de Cibeles procedente de Neptuno y arrancaba su marcha hacia la Puerta del Sol. La precedían cuatro 'costaleros' cargando un paso compuesto por una montaña de billetes con la cara de la presidenta Ayuso, acusada de "venderse" al sector de los VTC y con la ranchera 'El Rey' como hilo musical. En la pancarta principal se ha podido leer 'Por el cumplimiento de la Ley 1 VTC/ 30 taxis'.
"No se entiende cómo puede haber 9.000 coches negros en Madrid contaminando sin regulación (...) Están intentando sacar esta norma, que es una aberración para acabar con el taxi a medio plazo", han insistido los convocantes.
Asimismo, han rechazado que lo importante sea la negociación del reglamento autonómico del taxi -como ha sostenido el consejero de Transportes, David Pérez- y ha reclamado que se negocien las dos cosas de forma "paralela".
"No querremos coches negros sin garantía para el usuario. El taxi tiene sus obligaciones, que las leyes se adapten en beneficio de todos y no de unos pocos", ha zanjado la federación.
La Comunidad ofrece diálogo
El consejero de Transportes e Infraestructuras de la Comunidad de Madrid, David Pérez, ha asegurado que el seguimiento de la manifestación de taxistas ha sido muy reducido, en torno a 425 taxis de los 15.000 que circulan por la región, según datos del Ayuntamiento de Madrid.
Pérez ha afirmado que "la Comunidad de Madrid está abierta al diálogo con todos ellos. Lo que queremos es precisamente trabajar con el sector del taxi para fortalecerle, para lograr que sea cada vez más innovador, más competitivo y que situaciones como la llegada de las VTC, que no es exclusivo de la Comunidad de Madrid, sino que es una realidad en la de todo el mundo, pueda ser compatible con un servicio que nosotros respetamos, que nosotros apoyamos y que además queremos, que debe ser diferenciado de las VTC", ha indicado.
"En ese compromiso y en ese trabajo, estamos abiertos a seguir dialogando y a seguir buscando soluciones constructivas que desde luego van aportar mucho más a los taxistas que la politización o las manifestaciones que son injustificadas porque en este momento lo único que estamos haciendo es habilitar a que las VTC pueden seguir ejerciendo", ha dicho.
"La Ley Ábalos ha dejado un vacío legal que si no cubrimos desde las Comunidades Autónomas significaría que a partir de octubre 8.000 VTC dejarían de funcionar y creemos que, en una región pujante, con mucha actividad con una movilidad muy intensa como es Madrid, sería un perjuicio muy importante. Además, la legislación europea, la libertad de mercado y la demanda de los propios madrileños requiere poder contar con esas VTC", ha rematado.