La construcción de la M-30 se llevó por delante miles de árboles históricos de la ciudad. Su complejo entramado implicaba eliminar parte de la vegetación de la capital madrileña dejando apenas unos cuantos cientos de ejemplares en pie a su alrededor.
Algunos de ellos, como los plataneros de Arganzuela, vieron nacer los diferentes viales de la faraónica obra de la M-30, pero morirán este mismo martes con el inicio de la ampliación de la línea 11 del Metro de Madrid.
Vecinos y oposición han criticado la tala masiva de árboles en esta zona de la ciudad. Afirman que hay otros lugares para poner la estación del subterráneo, que se ha proyectado en el centro de un parque, y que no es necesario deforestar los más de 1.000 árboles que se asientan en los alrededores.
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Acusación a la que tanto la Comunidad de Madrid como el Ayuntamiento responden con la misma técnica que se utilizó en el levantamiento de la M-30: se van a plantar más árboles de los que se van a talar.
Concretamente, la Consejería de Transportes explica que (en total) se van a preservar 58, trasplantar 348 y talar 1.027 con motivo de la ampliación de la Línea 11. Para suplir esta poda, la Comunidad de Madrid pondrá a disposición del Ayuntamiento de Madrid 19.513 nuevos árboles para plantarlos "en toda la ciudad".
Pese a la crítica de los vecinos y la oposición, como Más Madrid que este lunes se ha desplazado hasta el lugar, la Dirección General de Infraestructuras afirma que han hecho un "gran esfuerzo" para reducir la afección del arbolado.
El método de deforestar grandes parcelas de terreno y prometer árboles jóvenes no es innovador. De hecho, el tándem Alberto Ruiz Gallardón-Esperanza Aguirre lo llevó a cabo durante toda la construcción de la M-30.
Prueba de ello es que el Gobierno de Alberto Ruiz Gallardón puso en marcha una legislación para compensar los árboles talados por los plantados. Es esa ley, la 8/2005, del 26 de diciembre, de protección y fomento del arbolado urbano de la Comunidad de Madrid, es la que (precisamente) la Comunidad de Madrid ahora va a tener en cuenta.
"Después del estudio exhaustivo de los 1.027 árboles afectados se ha determinado, a efectos de cálculo de reposición, una edad media de los mismos de 19 años, lo cual supone la reposición y puesta a disposición de la Administración municipal de un total de 19.513 árboles como medida de compensación", ha explicado la Consejería que coordina David Pérez a Madrid Total.
Tal y como ha podido saber este diario, los árboles que se trasladarán y no se talarán serán aquellos que estén en buen estado y tengan un tronco inferior a 40 centímetros.
El problema de este proyecto, entre muchos otros, es que este tipo de reforestaciones no siempre cosechan éxito. Y es que, es francamente difícil que los árboles se asienten en el terreno. En junio de 2006, la oposición aseguraba que el 64% de los árboles que habían sido plantados por las obras de la M-30 alrededor de todo Madrid se habían secado.
Según datos de la que por ese momento era portavoz socialista en el Ayuntamiento, Trinidad Jiménez, la M-30 había puesto fin a 20.500 árboles. O lo que es lo mismo, un parque del Retiro entero arrancado. La reforestación que prometió el PP en aquel entonces se cumplió, pero aunque se plantaron los árboles, no todos consiguieron sobrevivir.
Historia que se repite
De hecho, y como denunciaba por 2006 Trinidad Jiménez, este método supuso pérdidas económicas. Por un lado, los árboles que no terminaban de asentarse en el terreno y, por el otro, la replantación de cada árbol costaba 78 euros frente al 'gratis' que había sido talado.
En ese momento, frente a los más de 20.000 árboles que fueron talados, Gallardón replantó 78.877 dentro del conocido como Plan de Reforestación. Los árboles que llegaron a enraizar ahora dan sombra, pero, muchos otros históricos, se perdieron. Como, por ejemplo, un roble de 300 años que estaba catalogado y que se llevó por delante la M-30, precisamente en el Parque de Arganzuela.
El alcalde de la ciudad, José Luis Martínez Almeida, precisamente ha apelado este mismo lunes a ese concepto de reponer árboles para despreciar las críticas de la izquierda.
En declaraciones a los medios, ha insistido en que "no se va a perder un solo árbol como consecuencia de la ampliación de la línea 11 de Metro" y que la izquierda está forzando un debate "entre árboles o infraestructuras de transportes"
"Con sentido común todo es conciliable: los árboles que se vayan a talar serán reemplazados por más árboles aún", ha enfatizado.
Movimiento ciudadano
Aunque la tala de estos árboles no va a dar marcha atrás, los vecinos de Arganzuela han querido plasmar su disconformidad con el proyecto mediante carteles y rotuladores.
Este lunes, el parque que va a ser deforestado ha amanecido con carteles que respondían a un nombre de un vecino de la zona como padrino y protector del árbol que va a ser talado.
"Yo defiendo este árbol del Ayuntamiento", se puede leer en más de una decena de carteles.
Los vecinos se quejan de la tala porque consideran que en el plan inicial, el parque no necesitaba adaptarse a la parada de metro. Antes de que el proyecto de la línea 11 saliera a Información Pública, la parada del Subterráneo estaba en el paseo de Yeserías, en una zona de asfalto. Ahora, se ha decidido cambiar la ubicación a dentro del parque y talar 200 árboles.
La zona verde es muy querida por los vecinos de la zona, puesto que es el parque de juegos de la gran mayoría de los vecinos. Pero no va a ser la única zona afectada, ya que también se deforestarán los del parque de Comillas, la zona del Madrid Río y otros puntos del nuevo trazado de la línea 11.
Los vecinos han estado acompañados por los representantes de Más Madrid, Eduardo Rubiño, número 2 al Ayuntamiento, y el concejal José Luis Nieto. En su visita han asegurado que si Rita Maestre es alcaldesa de Madrid tras el 28-M, "dará la vuelta" al proyecto.
Afirman que la nueva aplicación es menos segura por estar "en mitad de un parque" y que es sólo un capricho de la Comunidad y el Ayuntamiento para vender "una estación turística situada en el corazón del parque".
"Se van a talar árboles como estos plataneros, con más de 40 años de vida, además de magnolios y pinos. Incluso en Madrid Río hay una especie arbustiva como el tejo que es protegida, por lo que tenemos dudas legales de que se pueda efectuar", ha advertido desde el parque Luis Nieto.