Madrid Aloja, la asociación madrileña de gestores de alquiler vacacional, lo tiene claro. Las medidas que acaba de lanzar José Luis Martínez-Almeida para ordenar el sector de los pisos turísticos son "ineficaces y retrasan una respuesta justa y efectiva" para regular el sector. "Madrid será como Nueva York, donde limitar los pisos turísticos sólo ha aumentado el precio de los hoteles", defiende Adolfo Merás, presidente de la patronal.
El Ayuntamiento de Madrid anunció este jueves un plan de acción para frenar desde ya la proliferación de viviendas de uso turístico (VUT). En primer lugar, Cibeles cierra el grifo de las licencias hasta que se apruebe en 2025 la modificación de la normativa actual, que es la que aprobó Manuela Carmena en 2019 y que el Consistorio popular considera "ineficaz".
El resto de medidas están encaminadas a combatir el problema de base que sufre este mercado en la capital española. La mayoría de pisos turísticos (más del 90%) funcionan sin licencia. También a partir de este viernes las multas por desobedecer las órdenes de cese del Ayuntamiento serán 30 veces más caras. Además, el Consistorio reforzará su equipo de inspectores en los próximos meses y publicará una lista con los VUT que cumplen la normativa.
Con todo ello, pretende atajar por ahora la desertización del Centro o la falta de oferta de vivienda residencial, entre otras cuestiones.
El anuncio del plan ha pillado por sorpresa a Madrid Aloja. Sobre todo, porque ellos sí que están de acuerdo con que su sector necesita una revisión de la normativa que se aprobó en 2019. La asociación "está a favor de una nueva regulación que ayude a dar seguridad jurídica al sector que consiga encontrar un punto de equilibrio entre residentes y el desarrollo turístico de la ciudad", remarcan en un comunicado enviado a los medios de comunicación.
Por eso, atacan las medidas "ineficaces" del plan de Almeida al tiempo que critican que el Ayuntamiento haya pospuesto "constantamente" la modificación del conocido como Plan Especial de Hospedaje (PEH) de Carmena.
El peso de las VUT en Madrid
En conversación telefónica con EL ESPAÑOL, Adolfo Merás insiste en que la crisis actual de la vivienda que sufre el país no se resuelve poniendo límites a los propietarios de las VUT. Incide, sobre todo, en que el crecimiento de la población en la región y en la capital está detrás del problema habitacional actual. Sólo en la ciudad viven 124.788 personas más que hace una década.
Según los datos del Ayuntamiento, Madrid tiene una capacidad de 158.756 camas para turistas. De ellas, el 30% se localizan en las VUT (47.589). Otro dato: el 65% de las plazas turísticas nuevas creadas desde 2017 corresponden a viviendas de uso turístico. Sin olvidar que también ha crecido el número de hoteles, pensiones, hostales, etcétera.
Cabe hacerse la siguiente pregunta: ¿está el sector turístico de Madrid preparado para absorber a los clientes de las viviendas de uso turístico irregulares abocadas al cierre? Desde el Area delegada de Turismo responden: "La capacidad hotelera supera las 90.000 plazas en Madrid, siendo la ocupación media de alrededor del 72%. Esto son unas 75.000 plazas ocupadas. Por tanto, los hoteles tienen capacidad suficiente de absorber la demanda que actualmente ocupan las VUT".
Cibeles recuerda, además, que un estudio de 2023 sitúa que la capital tiene menos presión turística que ciudades como Roma, Milán, Barcelona, París, Ámsterdam y Venecia.
Adolfo Merás pone sobre la mesa dos escenarios. Por un lado, sostiene que las habitaciones hoteleras se encarecerían, como ocurre "en Nueva York", si se limita a las VUT. En la ciudad estadounidense entró en vigor el 5 de septiembre una normativa que restringió los alquileres de corta duración. La medida impide, por ejemplo, arrendar una casa por menos de 30 días a menos que el anfitrión conviva con los invitados.
Según The Guardian, las tarifas hoteleras efectivamente han aumentado entre el primer trimestre de 2024 y el mismo periodo del año pasado. Otra de las consecuencias -según el diario británico- es que muchos visitantes y neoyorquinos han recurrido al mercado negro de los alquileres, a través de redes sociales o el boca a boca.
En segundo lugar, el presidente de Madrid Aloja también repara en que las condiciones que ofrece un piso turístico no son las mismas que las de un hotel. "Una familia con tres hijos no va a tres habitaciones de hotel, sino a un piso de tres habitaciones".
En cualquier caso, Merás subraya en que la valoración que hace pare este diario es sobre el plan 'urgente' de Almeida, ya que desde Madrid Aloja esperan que el Ayuntamiento prosiga con sus planes de regulación del sector de una forma efectiva y justa para esta actividad económica.