Las obras en la Plaza de Santa Ana, que conllevarán la tala de 28 árboles y el trasplante de 19 ejemplares, de los 54 que hay actualmente, se llevarán a cabo después de este verano. Así lo ha asegurado Borja Carabante, delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid, en un encuentro con los medios de comunicación este lunes.

Esto se hace como consecuencia de las remodelaciones que se harán en el parking subterráneo situado en dicha zona. "El proyecto está adjudicado. Es una concesión que tiene más de 50 años y que el Ayuntamiento ha decidido renovar para que en esos aparcamientos, donde ahora solo hay plazas de rotación, también puedan tener más plazas para residentes", ha explicado Carabante. Lo que serían unas 100 previstas.

Por esta razón, ha asegurado que "es una obra especialmente dirigida a los vecinos", ya que "es una actuación de interés público que justifica las actuaciones o el habitual perjuicio que pueda tener sobre el arbolado", para lo que existe una ley en la que se ampara.

Se trata de la Ley de Protección del Arbolado, que dice bajo qué condiciones se pueden acometer las talas. "En este caso compartimos con el defensor del pueblo el dictamen que hizo como consecuencia de las talas de la línea 11 de Metro, en la que advirtió que es necesario talar árboles cuando se hace para una mejora de las infraestructuras que justifique la calidad de vida de los vecinos", ha alegado el delegado.

Estas explicaciones vienen dadas por las quejas que se han recibido por parte de los residentes y hosteleros asentados en dicho lugar desde el anuncio de esta acción el pasado mes de enero.

"Hay un proyecto inicial que confío, desde luego, en que verá reducido de manera significativa el impacto sobre el arbolado que van a tener estas obras. Tengan los madrileños la seguridad de que se van a replantar los árboles y de que no solo se van a talar algunos, sino que también se va a producir el trasplante hacia otras zonas de la ciudad", defendió la situación José Luis Martínez-Almeida, alcalde de la capital, en ese momento.

Así, justificaba también la importancia de llevar a cabo estas obras en el parking por su propia estructura y por las filtraciones que hay de agua, que ponen en riesgo la seguridad de sus usuarios.

Protestas contra "el arboricidio"

La Asociación Vecinal de Sol y Barrio de Las Letras, la ciudadanía en general y los comerciantes de la zona han convocado este martes a las 21.00 horas la primera de una serie de protestas para impedir este "arboricidio", tal como informa Europa Press. El 85% del total, según ha explicado la Federación Regional de Vecinos de Madrid (FRAVM) en un comunicado.

Los árboles ya están marcados con cruces amarillas. "Al menos 30 árboles serán eliminados y el resto sometidos a un trasplante que casi con toda probabilidad acabará con ellos. Estamos ante un nuevo arboricidio que el Consistorio tiene previsto ejecutar de forma inmediata con motivo de la reforma del parking municipal de gestión privada que se encuentra debajo de la plaza", ha dicho la asociación.

Árboles señalizados para talar en la Plaza de Santa Ana de la capital. Europa Press

"El Ayuntamiento ha actuado con premeditación y alevosía aprovechando el verano y la etapa vacacional para llevar adelante un arboricidio más en Madrid, en este caso en un barrio donde ya hace meses se perpetuó otro, el de la Plaza del Carmen, y que tiene un importante déficit de zonas públicas arboladas, que a lo largo de los años han ido desapareciendo o menguando", ha advertido la entidad vecinal.

La portavoz de Más Madrid en el Ayuntamiento, Rita Maestre, también se ha pronunciado ante este hecho. Ha exigido parar el "sinsentido" que acabará no solo con los árboles de Santa Ana, sino también "con 46 millones menos en arcas municipales".

La vecindad se pregunta "por qué mientras el Ayuntamiento proyecta esta obra, ignora la reclamación de reforma y reapertura de un parking municipal para residentes próximo, el de la calle Alameda, que lleva cinco años cerrado".

Dicha asociación creó para unirse a esta oposición en enero una petición en la plataforma de recogida de firmas Change.org. Una campaña que ya tiene casi 4.700 apoyos.