Iglesias, conventos, monumentos, hoteles, teatros, muchos palacios... La historia de Madrid está plagada de edificios que ya no existen. En 2015, la Guía visual del Madrid Desaparecido (ediciones La Librería) recopiló 170 edificaciones que, por diferentes motivos, desaparecieron del mapa. La obra está escrita por Isabel Gea Ortigas.
A continuación, se relatan de forma breve las 10 construcciones que se han esfumado en los últimos tiempos, desde los años 90 hasta 2015. El artículo se basa fundamentalmente en lo escrito por la autora en su Guía.
Fábrica de Buñuelos (desaparecido en 2011)
Situada en el número 2 de la calle del Ángel, este viejo negocio de buñolería y churrería ocupó durante años el bajo de un edificio industrial de tres plantas. A mediados del siglo pasado, el establecimiento figuraba a nombre del churrero José de la Obra. En 2011 tiraron la construcción abajo.
Antiguo aparcamiento de Santo Domingo (2006)
Durante décadas, la plaza de Santo Domingo estuvo ocupada por un aparcamiento público semienterrado y con forma de 'piano de cola'. Tuvo dos ampliaciones: una en 1967 y otra en 1979. Hace casi dos décadas, se demolieron las plantas sobre rasante para despejar la plaza y 'entregársela' al peatón. En cualquier caso, desde 2005 a 2022, el parking estuvo cerrado por deficiencias estructurales. El renovado subterráneo cuenta hoy con 320 plazas, 71 para los vecinos.
Edificio Windsor (2005)
Construido en 1979, el edificio Windsor se elevaba 106 metros de altura sobre la parcela del número 65 de la Avenida de Raimundo Fernández Villaverde, en AZCA. Fue obra de los arquitectos Genaro Alas Rodríguez, Pedro Casariego Hernández-Vaquero, Luis y Rafael Alemany Indarte, Ignacio Ferrero Ruiz de la Prada y Manuel del Río. Se construyó en hormigón y hierro y destacaba por sus fachadas acristaladas. La construcción, símbolo de la adinerada familia Reyzábal, ardió en un espectacular incendio en 2005 y fue derribada a los pocos meses.
Hotel y vivienda para José A. Bohrer (2003)
Obra del arquitecto José Azpiroz y Azpiroz, esta obra singular de los años 50 ocupó la parcela del número 62 del Paseo de la Castellana hasta que en 2003 se dio vía libre para su derribo. En su lugar, se levantaron viviendas de lujo.
Cine Metropolitano (2003)
La parcela que hoy ocupa el hotel VP Jardín Metropolitano (cerrado en estos momentos por la renovación de las instalaciones) fue en el pasado una sala de teatro con capacidad para 1.700 espectadores. Se inauguró en 1929 y, años después, se convirtió en cine. También albergó una sala de bodas y banquetes. La antigua construcción, situada en el número 12 de la Avenida Reina Victoria, se derribó en 2003.
Antiguo Palacio de los Deportes (2001)
Un incendio en 2001 acabó con el antiguo Palacio de los Deportes, el primer edificio deportivo cubierto de grandes dimensiones que tuvo Madrid. Se usó como velódromo, como pista de atletismo, para espectáculos circenses y acabó albergando pistas de baloncesto, ciclismo, hockey y atletismo. El pabellón que se levantó en su lugar es el popular WiZink Center de Goya.
Madrid Cinema (1999)
Diseñado por Alfonso María Sánchez Vega, este cinematógrafo tenía capacidad para 1.000 espectadores. Pese a que fue concebido como cine, el Madrid-Cinema no tardó en convertirse en el teatro Maravillas, que alternó espectáculos musicales y películas. El espacio se cerró en 1999 y se derribó años después.
Edificio La Pagoda - Laboratorios Jorba (1999)
En 1967 se inauguró esta peculiar construcción de Miguel Fisac como sede de unos laboratorios farmacéuticos. La construcción era conocida por su peculiar torre de plantas cuadradas que, giradas alternativamente, formaban un polígono octogonal estrellado. Se tiró abajo en 1999.
Cine Covadonga (1997)
Antes de pasar a mejor vida en los años 90 por culpa de un incendio, el edificio del número 161 de López de Hoyos fue conocido por los aficionados al cine como 'El Covancha' y, más adelante, sirvió como sede de la Filmoteca Nacional.
Estación Sur de Autobuses (1997)
La Estación Sur de Autobuses fue un edificio que duró poco, unos 25 años. Según la autora de la Guía visual, el proyecto se "inspiró en la estación de autobuses de Nueva York, situada en pleno centro de la Gran Manzana". Estaba enclavada entre la calle Canarias, el Paseo de las Delicias, Palos de la Frontera y Batalla del Salado. Isabel Gea escribe en su obra que en Madrid "no se tuvo en cuenta" el impacto de esta infraestructura en la circulación de la ciudad. En 1997, la estación se movió a Méndez Álvaro y la construcción de la calle Canarias pasó a ser, más adelante, el Centro Dotacional Integrado de Arganzuela.