La Comunidad de Madrid endurece las restricciones en las residencias de mayores ante el avance de la quinta ola de contagios por la Covid. En un nuevo protocolo que entra en vigor este jueves se recomienda limitar las visitas a personas que cuenten con la pauta completa de inmunización contrael coronavirus. Esta actualización respecto al vigente desde el 1 de junio coincide con la suspensión de visitas en ocho centros tras más de 200 casos.
Entre las recomendaciones que recoge el protocolo figura el uso de mascarilla por parte de visitantes y trabajadores en todo momento, así como la realización de pruebas diagnósticas, PCR o test de antígenos, a la vuelta de las vacaciones previas a acudir a los centros, según ha indicado el Gobierno regional en un comunicado.
Los centros y residencias de mayores han sido escenario en las últimas semanas de varios brotes que han obligado a suspender las visitas en ocho residencias de la región, según han informado a Europa Press fuentes de la Consejería de Familia, Juventud y Política Social.
En concreto, hasta este martes se registraban un total de 222 contagiados y se han suspendido las visitas en los centros de Getafe Alzheimer (Getafe), La Ermita (Parla), Isla Taray (Morata de Tajuña) y Sagrada Familia, Concesol, Nuestra Señora del Pilar, Margarita Retuerto y Jazmín en la capital.
En la actualización del protocolo elaborada por la Dirección General de Coordinación Socio-Sanitaria y la Dirección General de Atención al Mayor y a la Dependencia se intensifican de este modo las medidas para reducir el riesgo de contagios.
Se trata de una guía con recomendaciones que recoge líneas generales de actuación como el uso de mascarilla obligatorio para las visitas y trabajadores o el mantenimiento de la distancia de seguridad sanitaria en las instalaciones.
De cara al periodo estival, recomienda que tanto los usuarios como los trabajadores que vuelvan a las instalaciones tras un periodo vacacional de más de siete días aporten una prueba PCR negativa realizada en las 72 horas previas a su vuelta o bien un test de antígenos. En el caso de los trabajadores se esperará al resultado negativo antes de su plena incorporación.
Además, los trabajadores no vacunados deberán permanecer con las mascarillas incluso en su tiempo de descanso y mantener en todo momento la distancia de seguridad.
Tres visitas en una semana
Así, se mantiene la posibilidad de que cada residente reciba tres visitas semanales de una hora de duración, en cada una de las cuales pueden participar dos familiares. Si bien en estas visitas pueden participar menores, como norma general se recomienda que no acudan personas que no tengan la pauta de vacunación completa.
En cualquier caso, todos los visitantes deberán respetar la distancia de seguridad y utilizar en todo momento la mascarilla, recomendación que se extiende a los residentes cuando vayan a tener contacto con trabajadores y visitantes. Además, no se permitirá el acceso a visitantes que hayan tenido contacto estrecho con positivos o tengan síntomas, aunque estén vacunados.
También mantiene la recomendación de que las visitas se realicen en las zonas exteriores de los centros, donde también aplican las medidas de distancia social y uso de mascarilla. Los residentes vacunados podrán seguir recibiendo en sus habitaciones y los centros deberán facilitar a los familiares la estancia en distintas zonas comunes del interior para realizar las visitas.
En estas últimas se deberá delimitar un aforo máximo en función del tamaño de las mismas y, como norma general, este aforo máximo será de un cuarto de la capacidad habitual del recinto dedicado a facilitar estos encuentros.
Los centros deberán mantener un registro de las visitas, y en caso de que alguna residencia vea suspendidas las mismas, así como las salidas e ingresos debido a que la autoridad sanitaria declare la existencia de un brote en las instalaciones, deberán facilitar a los residentes los medios para comunicarse a diario con sus familiares.