La jugada del sindicato médico es clara: lanzar un órdago a Ayuso tras el silencio que se ha producido por parte de la Administración en la huelga de las urgencias rurales. Tras dos días de paros, la Consejería de Sanidad no ha llamado al Comité de Huelga y eso no hace más que caldear el ambiente entre los convocantes.

Con unos servicios mínimos del 100%, el paro de los médicos que está ya en marcha no se nota a la hora de prestar servicio, y eso hace que la presión para negociar sea menor. Ahora bien, ¿y si la huelga se extiende a toda la Atención Primaria?

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Los médicos son conscientes de que la huelga que han convocado para el próximo día 21 de noviembre sí podría suponer un problema para Sanidad. Sus servicios mínimos ya no podrían ser del 100%, como ocurre ahora. Eso se traduciría en retrasos en las citas y problemas en el día a día de los centros de salud. Presión que, ahora sí, les daría una baza con la que negociar con Ayuso.

Según los datos que maneja el sindicato mayoritario de los médicos madrileños, en el sistema sanitario regional hay 4.240 médicos de Familia y 720 pediatras. Nada que ver con los 200 facultativos que ahora están en huelga.

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Por el momento, la consejería de Sanidad rehúsa hacer valoraciones de la convocatoria de huelga indefinida en Atención Primaria y se centra en el conflicto con el Gobierno central, que ha utilizado los paros médicos para atacar su gestión sanitaria.

La guerra Darias-Ayuso favorece a la Comunidad de Madrid, puesto que permite al ejecutivo regional centrarse en responder al Gobierno de Pedro Sánchez, mientras relega la Mesa Sectorial que serviría para analizar los problemas de la Atención Primaria.

Negociar

El sindicato AMYTS reconoce que la convocatoria del próximo día 21 es una forma de presionar a la Puerta del Sol y obligar al gobierno de Ayuso a "negociar" mejores condiciones para los médicos de Familia y Pediatras.

"El fin es la mediación", insisten los médicos de AMYTS mientras comprueban que, en los días que lleva vigente la huelga, nadie les ha llamado para sentarse a desconvocarla. "Ni siquiera para explicarnos el nuevo modelo de atención telemática".

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EL ESPAÑOL se ha puesto en contacto con otros sindicatos que componen la Mesa de Negociación. Por el momento, ninguno de ellos estudia convocar una nueva huelga. Los médicos tampoco han querido contar con ellos para esta convocatoria, sobre todo después del plantón que les dieron hace dos semanas al desconvocar la huelga conjunta.

El conflicto con el Gobierno de Pedro Sánchez da a Ayuso y su consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, la oportunidad de evitar hacer declaraciones sobre las huelgas convocadas en su región y centrarse en pugna con la ministra de Sanidad.

Pulso al Gobierno

Tras las palabras de la ministra de Sanidad, Carolina Darias, Escudero ha criticado al Ejecutivo por "manipular a la opinión pública desde el Consejo de Ministros". "Eso es intolerable", ha insistido.

Por su parte, Darias ha acusado a Madrid de haber reducido las plazas disponibles para Atención Primaria en un 2%. Un dato que ha rebatido Escudero afirmando que Madrid cuenta con "4.000 profesionales sanitarios más que antes de la pandemia".

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"Madrid tiene 641 profesionales más solo en Atención Primaria. Es la comunidad autónoma que más eligen los residentes", ha enfatizado. Pero los datos del consejero de Sanidad tienen trampa. Muchos residentes hacen su estancia en Madrid, pero luego no se quedan a trabajar.

Según datos del sindicato AMYTS, de los 443 MIR de Familia que culminaron el año pasado su formación sólo se quedaron 37.

Plazas MIR

Escudero replica a la ministra de Sanidad afirmando que el ejecutivo madrileño planifica las plazas MIR "con el objetivo de cubrirlas y garantizar una formación de calidad". "No para que queden sin cubrir, como ocurre en otras comunidades autónomas. Madrid cubre el 100% de sus plazas", ha añadido.

En este dato sí acierta Escudero. De hecho, como informó este diario, en la última convocatoria MIR el Gobierno intentó colocar las 200 plazas de Medicina de Familia que habían quedado desiertas en varias regiones (sobre todo en Cataluña) y aun bajando las ratios y ampliando los cupos de médicos extracomunitarios no lo consiguió.

El mayor número de las plazas sin cubrir se localizó en Cataluña, que acumulaba el 35,5% de las vacantes desiertas. En total, son 71 puestos. Le seguían Castilla y León con 45 vacantes de MIR de Familia y Extremadura con 40. Ninguna en Madrid.