La gran protesta sanitaria ha reunido este domingo a 250.000 personas en el centro de Madrid, según los datos de la Delegación de Gobierno. La marcha supera así a la celebrada el 13 de noviembre, que congregó a 200.000 personas.
Organizada por plataformas vecinales y azuzada desde la izquierda madrileña, los manifestados han reclamado hoy "más médicos", "mejores condiciones" y "más inversión" para la Atención Primaria. Y todo ello señalando a un nombre, el de Isabel Díaz Ayuso, a quien han culpado del "deterioro" de la sanidad pública madrileña.
La manifestación, por tanto, se ha convertido en una especie de secuela de la de noviembre. Ha estado convocada y apoyada por más de 70 asociaciones y su diseño ha sido similar.
Sobre las 12 horas, cuatro columnas han partido desde Nuevos Ministerios, Plaza de España, Hospital de La Princesa y Legazpi. Todas ellas han confluido en Cibeles antes de las 14 horas. Ahí, se ha leído un manifiesto en un pequeño escenario preparado frente a la sede del Ayuntamiento de Madrid.
La protesta se ha celebrado en un momento delicado. Primero, porque cerca de 4.240 médicos de Familia y 720 pediatras de Atención Primaria están en huelga en la región. Y segundo, porque faltan menos de cuatro meses para las elecciones autonómicas. Mientras tanto, desde el Gobierno regional se habla de "huelga política" y sostienen que la manifestación no trataba de "sanidad pública" y que estaba movida por "otro tipo de condicionantes".
Respaldo desde la izquierda
Como ocurrió hace tres meses, partidos políticos de la izquierda han apoyado la cita. También rostros de la cultura como Carlos Bardem, Juan Echanove, Rozalén o Antonio De la Torre. Desde el Gobierno central, llamó a la ciudadanía a movilizarse este domingo la ministra de Derechos Sociales, de Unidas Podemos, Ione Belarra.
Este domingo, a pie de calle, ha acudido la plana mayor de Más Madrid: la portavoz en la Asamblea, Mónica García; el líder del partido, Íñigo Errejón; y el portavoz de la campaña de la formación en el Ayuntamiento, Eduardo Fernández Rubiño. También han participado el portavoz autonómico del PSOE, Juan Lobato, la candidata socialista a la Alcaldía, Reyes Maroto, cargos de Unidas Podemos y los líderes de UGT y CCOO.
"Desmantelamiento de la sanidad"
"Estamos aquí, como todos los vecinos de los barrios y de los pueblos, para defender la sanidad pública que Ayuso y el PP, año tras año, han ido desmantelando", ha resumido Luis Díaz, uno de los participantes que encabezaba la columna de Gran Vía. Antes de llegar a Cibeles, esta columna avanzaba entre batukadas, pitos de los silbatos y un ambiente por ratos festivo, pero que se entremezclaba con consignas reivindicativas más agresivas.
Se han visto y escuchado, a modo de resumen, dos tipos de consignas: las que pedían, de forma escueta, una "sanidad pública de calidad" y las que directamente señalaban a Ayuso. "Ayuso dimisión" o "pinocha" -en referencia a un ninot de la presidenta empleado en manifestaciones sanitarias- han sido algunas de las consignas más escuchadas. Otros nombres señalados han sido el de Enrique Ruiz Escudero (consejero de Sanidad) y el de Javier Fernández-Lasquetty (consejero de Economía, Hacienda y Empleo).
La marcha ha estado secundada, sobre todo, por personas de mediana edad. Al menos, es la impresión que tenían algunos de los manifestados consultados. Varios acudían apoyando a plataformas vecinales. Otros, como Julio, un joven fisioterapeuta, representaban a los sanitarios más indignados con la situación de la Atención Primaria. En su caso, ha alertado de que en la región solo trabajan 222 fisioterapeutas en la Atención Primaria. "Estamos intentando pedir que bajen las ratios de las unidades de atención específicas", se ha quejado.
Las cuatro columnas han confluido en Cibeles antes de las 14 horas. La percepción era que la manifestación había reunido, al menos, el mismo número de personas que la de noviembre. Aunque la organización ha elevado la participación a un millón. Los datos ofrecidos por Delgación de Gobierno de Madrid son los aportados por la Policía Nacional.
En este punto de la Castellana había multitud de personas sosteniendo hojas blancas con proclamas de "Ayuso abuso". Como en la del 13-N, ha vuelto a aparecer en Cibeles el ninot, "Pinocha", que ridiculiza la imagen de la presidenta.
Javier es uno de los jóvenes que ha llegado hasta Cibeles. Pese a culpar también a la presidenta del "desmantelamiento" de la sanidad pública, considera que es un problema que comenzó antes de que ella llegara al poder. Niega, por otro lado, que un volumen tan grande de manifestados haya participado incitado por la izquierda política. "Yo estoy aquí porque mi madre está enferma", justificaba el joven, que cree que la única solución pasa por las "urnas".
Sol responde y defiende su gestión
Los propulsores de la protesta consideran que la situación en la Atención Primaria no ha mejorado en los últimos meses y califican de "fracaso absoluto" el cierre de los Puntos de Atención Continuada (PAC). Durante la marcha, desde UGT han solicitado además la reapertura de los servicios de urgencias extrahospitalarios, de atención domiciliaria y rural.
El Gobierno de la Comunidad de Madrid, sin embargo, ha tratado de minimizar estos días pasados el peso de la marcha. Consideran que persigue fines políticos y defienden, pese a las críticas, que Madrid es la región "con mayor cobertura horaria en Atención Primaria en la sanidad pública" y que cuenta con la "mejor red hospitalaria" con 35 centros.
Desde Sol han reaccionado a la marcha destacando que el tiempo medio de espera en Primaria es "la mitad que el de la media nacional" y resaltando que las listas de espera "están entre las más bajas de España".
En concreto, detallan que la Comunidad de Madrid ha destinado más de 200 millones al Plan de Primaria y que se han subido en 3.800 euros de media anuales el salario de los médicos de familia y en otros 3.300 el de los pediatras. "Hemos convocado 9.574 plazas de estabilización para el personal estatutario del Servicio Madrileño de Salud", inciden.
Este mismo lunes, la Consejería de Sanidad y el comité de huelga de médicos y pediatras de Atención Primaria se reunirán por undécima vez desde que arrancó la huelga el pasado 21 de noviembre. Sobre la mesa estará el proyecto piloto de exceso de agendas puesto en marcha por la Comunidad en 22 centros de salud el pasado 30 de enero, que aún genera discrepancias entre los sanitarios en huelga.
En declaraciones recogidas por Europa Press. el secretario general del PP de Madrid, Alfonso Serrano, ha asegurado que el Ejecutivo regional seguirá trabajando por "mejorar y reforzar" la sanidad pública frente al "ruido, griterío y el intento de crispar de la izquierda madrileña". "La manifestación es consecuencia de una huelga estrictamente política", ha señalado Serrano, incidiendo en que "no hay más que ver quienes son los convocantes e impulsores" al margen de los partidos de izquierda.
"Vemos lo de siempre, insultos y ataques de plataformas y partidos de izquierda. Nunca en la Comunidad de Madrid hemos tenido tanto presupuesto en sanidad y Madrid sigue apostando por la sanidad con el mayor presupuesto sanitario que ha tenido y con el mayor número de profesionales fijos", ha respondido.