Cuando Diego Díaz cumplió 18 años comunicó a sus padres la decisión de afiliarse al PSOE. En su familia no había militado nadie antes en un partido político aunque, en su casa, sí había visto como existía una simpatía hacia el partido socialista.

"Mi madre me dijo que ya era hora, que todos sabían que esto iba a pasar". Su ideología había estado clara desde el principio y su implicación con diferentes agrupaciones locales, sobre todo ligadas a la música y el folclore regional, le habían dado ese primer acercamiento a la vida pública.

Ahora, Díaz habla con Madrid Total al otro lado del teléfono intentando compaginar su trabajo en un estudio de Arquitectura en Madrid con su gran reto para este 28 de mayo: dar al PSOE la alcaldía de San Lorenzo de El Escorial y convertirse en el primer alcalde bajo estas siglas desde 1995.

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Diego apenas tenía uso de razón cuando el PSOE gobernó por última vez en San Lorenzo de El Escorial y, por eso, está más animado que nunca. Su perfil es muy similar al del secretario general regional, Juan Lobato, una persona joven, pacífica, con proyectos y sin "crispación". De los que se trabajan la calle día a día.

"Cuando llegué a la secretaría general el año pasado empezamos a hacer mesas informativas para que no se te vea sólo en la calle los 15 días antes de pedir el voto. Me parece casi insultante", explica.

Los vecinos de San Lorenzo de El Escorial conocen al candidato por su faceta de político pero también por la de artista. Desde bien pequeño forma parte de agrupaciones de folclore local y grupos de baile. Una forma de reivindicar las tradiciones madrileñas porque, como él mismo dice, "cuesta menos encontrar un tablao flamenco en Madrid que un lugar de jotas".

Ahora, si consigue salir elegido alcalde, tiene claro que va a poner en valor toda esta tradición de la que él mismo forma parte enseñándola en las escuelas y creando afición.

"Danza de música de raíz y jotas" son sus aficiones fuera de la política y la arquitectura, por eso quiere que todos sus vecinos conozcan los orígenes de la cultura de esta zona de Madrid. "Hay veces que la derecha se adueña de la cultura popular, como si fuese suya, pero no es así", reivindica. Recuerda que, en las romerías, "entramos todos" sin importar la bandera política.

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Por eso en su programa tiene proyectos para mantener este patrimonio inmaterial con la colaboración de las asociaciones, peñas y grupos folclóricos. La idea es trasladar toda esa cultura a los colegios como ocurre en País Vasco donde, a su juicio, "lo hacen muy bien" promocionando la cultura local y el patrimonio inmaterial.

De hecho, este candidato socialista lamenta que no haya tanto orgullo de la cultura local como ocurre en País Vasco o Andalucía. "En esas Comunidades hacen pedagogía desde muy pequeños con las raíces y con identificar cuál es su cultura y su religión. En Madrid todo eso está apartado a un lado", lamenta.

Las encuestas son favorables a los socialistas y Díaz es consciente de que tendrá que pactar. Pero eso no le importa. Fue concejal después de que Vecinos por San Lorenzo de El Escorial obtuviera la Alcaldía en 2015 gracias a un macro apoyo de investidura con el PSOE, IU, Sí Se Puede y Ciudadanos.

En ese momento, con tan sólo 21 años, el PSOE le propuso para ir tercero en las listas y se quedó a 40 votos de salir elegido concejal. Cree que fue algo parecido al destino porque todavía estaba en la universidad y, tal vez, ser candidato habría hecho que se apartara la carrera.

Años más tarde, en 2018, la número dos en las listas del PSOE se tenía que retirar de baja larga por una enfermedad y le propuso "dejar correr la lista". Ahí ya había entregado el trabajo de fin de grado y, en cierto modo, fue una forma de cerrar el círculo.

Un voto

Fue siendo concejal cuando sintió que podía hacer más por el partido y decidió dar un paso adelante para ser secretario general de la agrupación en el municipio. Era 2019 y su candidatura no salió adelante por un único voto.

Su fracaso entre los afiliados socialistas no le desanimó, ni tampoco le tentó a irse a otros partidos de los que, aseguran, tuvo "ofertas". Ahora, en 2022, se ha tomado la revancha (metafóricamente hablando) y lidera el partido.

Para Diego Díaz es muy importante compaginar la actividad política y la profesional. "Tiene que haber un retorno para no convertirte en un depredador de lo público", defiende frente a los que viven de la política.

Como en la carrera regional, la polémica de los pactos del PSOE con Bildu, y la presencia de personas condenadas por delitos de sangre, han llegado hasta San Lorenzo de El Escorial. "Alguien te dice algo, pero es muy puntual".

Su carácter amable (es muy perfil Lobato) le hace no criticar ni cuando le rompen sus carteles. "Bueno, lo hacen con el mío y con el de alado", bromea.