¿Cuánto pagan por estar en una mesa electoral en Madrid este 23-J?

Este domingo se celebran las elecciones generales del España y 31.302 madrileños están llamados a ser miembros de las mesas electorales.

Los seleccionados para ejercer como presidente o vocal ya conocen a qué colegio electoral tienen que acudir y deberán personarse allí a partir de las 8.00 horas para empezar a configurar las mesas.

Todos ellos cobrarán por sus horas. La pregunta del millón es: ¿cuánto cobra una persona a la que le toca estar el 23J en los centros de votación?

En estas elecciones generales se cobrará más que en los comicios anteriores, celebrados en 2019. Según el Gobierno de España, la subida de la percepción económica de los miembros de la mesa está vinculada con la situación económica actual. 

Concretamente, cobrarán 70 euros, cinco euros más que en años anteriores.

La retribución que perciben los miembros de la mesa está marcada por la Orden Ministerial INT/282/2019 de 7 de marzo, sobre la regulación de la dieta de los miembros de las mesas electorales.

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En este caso, se ha optado por elevar el importe y subir de 65 a 70 euros las dietas de los españoles elegidos por sorteo público para mejorar la gestión y la realización del pago, ya que muchos se hacen en efectivo.

"Para adaptarse a la situación económica actual, se ha aumentado la compensación a percibir por los ciudadanos elegidos para participar como miembros de mesa en los procesos electorales que se celebren", explica el Gobierno sobre este aumento.

¿Cómo está formada la mesa electoral del 23J?

La mesa electoral para el 23J está formada por tres miembros: una presidencia y dos vocalías. Cada uno de ellos cuenta con dos personas suplentes. De este modo, se convocan a nueve personas para cada mesa electoral, aunque al final solo permanecen tres personas a lo largo de la jornada electoral.

Estos puestos son designados después de realizarse un sorteo público entre los ciudadanos que están censados en una sección electoral, división que hace referencia a una circunscripción de un mínimo de 500 y un máximo de 2.000 electores.

Los fallos más comunes en la mesa electoral

Los miembros de la mesa electoral tienen que apuntar en un folio y hacer un seguimiento de los ciudadanos que acuden a votar. En este proceso, se pueden cometer errores al apuntar de forma incorrecta a un votante que tenga un apellido común o similar al de otra persona, o porque se elimine de la lista un nombre que no es el correcto.

Otro de los fallos más comunes que se producen en la mesa electoral son no verificar bien el DNI de la persona que acude a votar. Esta acción consiste en revisar que el DNI del votante se corresponde con el de la persona que ha acudido al colegio electoral a ejercer su derecho al voto.

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Después del cierre de los colegios, comienza el recuento de votos. El presidente y los vocales de la mesa suelen pedir ayuda para realizar el recuento de votos, por ejemplo, a los apoderados e interventores. Sin embargo, es una actuación incorrecta porque incumple la ley, ya que solo pueden hacer el recuento los miembros de la mesa electoral.

Otra de las confusiones que suelen darse es no acudir a votar al colegio electoral correcto, el que se ha asignado según la tarjeta del censo electoral. Así, hay votantes que suelen acudir a otro distinto, por lo que es importante revisar adónde debemos acudir a votar.