Es oficial. La Comunidad de Madrid va a prohibir, a partir del 4 de noviembre, la entrada de patinetes eléctricos a la red de transporte público de la región. Es decir, autobuses (tanto regionales como de la EMT), intercambiadores y Metro.
La prohibición, aprobada este mismo viernes, se tomará de forma temporal tras el incidente registrado el pasado día 17 al explotar la batería de uno de estos dispositivos en el interior de un tren que se encontraba en la estación de La Elipa, en la Línea 2 de Metro.
Madrid ya anunció hace unas semanas que estaban considerando esta opción y ha sido el consejo de administración del Consorcio Regional de Transportes (CRTM) quien la ha tomado.
Por el momento, se conoce que la prohibición entrará en vigor el próximo 4 de noviembre. Afectará a los autobuses de la Empresa Municipal de Transportes de Madrid (EMT) e interurbanos y urbanos en otros municipios, así como en las instalaciones y vehículos de Metro de Madrid y los cinco intercambiadores de Plaza de Castilla, Moncloa, Príncipe Pío, Plaza Elíptica y Avenida de América.
La decisión no es permanente, sino una medida "temporal" hasta que se verifiquen completamente las condiciones de seguridad de este tipo de elementos en el transporte público. Según ha indicado el Gobierno regional en un comunicado.
Hay que recordar que en la ciudad de Barcelona, la prohibición de este tipo de vehículos empezó igual, de forma temporal; pero finalmente se ha decidido prohibir su entrada de manera indefinida.
Tal y como han informado desde el Ejecutivo de Isabel Díaz Ayuso, el incumplimiento conllevará la inmediata expulsión de los infractores.
Por el momento, y para velar por el cumplimiento de esta resolución, el CRTM solicitará a los operadores implicados la difusión este cambio en sus canales de información digitales e impresos, como redes sociales, páginas web, cartelería, paneles o vinilos informativos.