El culebrón de las invitaciones entre el Gobierno de la Comunidad de Madrid y el nacional tiene un nuevo capítulo. Y es que, la amenaza vertida desde la Puerta del Sol respecto a prohibir a miembros del Ejecutivo de Sánchez acudir a sus actos, ha quedado en nada.
El "golpe por golpe" que tanto imploraba la presidenta Isabel Díaz Ayuso en la Puerta del Sol hace unas semanas -y que repetía tras la "ofensa" de no invitarla a la inauguración del tramo Madrid-Asturias-, se ha quedado en nada. O, más bien, en un "ofensa y amenaza".
Así, el consejero de Medio Ambiente, Agricultura e Interior, Carlos Novillo, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, ha confirmado que desde el Ejecutivo regional se ha invitado al delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Martín.
Es cierto que Martín no es un ministro de Pedro Sánchez (ni el propio presidente) pero sí es la mayor representación del Ejecutivo nacional en la Comunidad de Madrid.
Aun así, la región quiere guardarse un 'as' en la manga y todavía asegura que, aunque confirmando su presencia, no se puede asegurar de qué "manera" participará el delegado.
Tradicionalmente, la presidenta de la Comunidad y el delegado del Gobierno dan dos discursos en el Palacio de Correos, sede del Ejecutivo de Ayuso. Por la tensión creciente entre ambas administraciones, han estado plagados de polémica e indirectas durante sus últimas ediciones.
El consejero de Medio Ambiente, que hoy ha hecho de portavoz del Ejecutivo, ha concretado que los pormenores del acto los está cerrando el Departamento de Protocolo.
Así las cosas, en "estos días" se conocerá "cómo va a ser el desarrollo" abriendo la puerta a que el Delegado no tenga turno de intervención.
"Evidentemente, el Servicio de Protocolo estará hablando con el Servicio de Protocolo de la Delegación de Gobierno. Son los que determinarán cómo será la participación del delegado y de otras autoridades en ese acto tan importante, que es de todos los madrileños y de todos los españoles", ha zanjado.
La polémica
Que ahora Ayuso se pregunte si hablará (o no) el delegado del Gobierno se remonta a la polémica suscitada esta semana, cuando Ejecutivo central decidió no invitar a la presidenta a la inauguración del AVE Madrid-Asturias.
"Madrid no invitará nunca al Gobierno a los actos que se organicen, de la misma forma que el Gobierno no invita nunca a la Comunidad". "Golpe por golpe", remarcaban fuentes del equipo de Ayuso a Madrid Total.
Por otro lado, fuentes del Ministerio de Óscar Puente aseguraban que Ayuso no está invitada porque la línea que se inaugura es una ampliación de la ya existente hasta Castilla y León.
Así, sólo se invita a los presidentes de las comunidades autónomas donde "se inaugura algo" y, en este caso, "se trata de un tramo entre Castilla y León y Asturias".
"Cuando se inauguró Ourense, Extremadura, Burgos o Murcia tampoco estuvo la Comunidad de Madrid, por ejemplo, porque los tramos a inaugurar, aunque se haga lógicamente el trayecto completo, no están en la Comunidad. Es el mismo criterio de siempre", apuntaban.