La semana tiene 168 horas, pero a Fernando Villalaín le cunden como si fueran 300. El alcalde de Morata de Tajuña compatibiliza su puesto como regidor con dirigir la rondalla monteña y ser el director artístico de la Pasión de Morata. 

También le da tiempo para ir a clases de bailes de salón, ser un apasionado del teatro, criar pájaros y, hasta que tomó el bastón de mando tras las elecciones municipales de mayo, trabajar en el banco del que sigue cobrando (como él mismo bromea); porque está de excedencia.

Como un apasionado de las redes sociales, el alcalde se ha vuelto viral en multitud de ocasiones. La verdad es que de casta le viene al galgo. Villalaín ha trabajado en el equipo de comunicación del PP de Madrid muchos años como secretario ejecutivo de la oficina virtual. Experiencia que se deja ver en sus redes sociales en las que, diariamente, da promoción a locales y comercios que abren en Morata.

Porque el alcalde sabe que su pueblo va a seguir creciendo (espera llegar a los 10.000 empadronados en cinco años) y para eso hace falta mucha más vida: "una escuela infantil", que los jóvenes cursen Bachillerato y Formación Profesional allí y, sobre todo, vivienda. 

PREGUNTA: ¿Por qué quiso ser alcalde de Morata de Tajuña?

RESPUESTA: Estuve durante cuatro años en la oposición en un pequeño municipio cerca de Morata que se llama Orusco de Tajuña, de 1.300 habitantes. Me gustaba mucho lo que hacía y pensé que mi cometido iba a quedar ahí. Pero, en agosto, la presidenta Isabel Díaz Ayuso, me pidió volver al municipio donde vivo. Yo nunca me olvidaré de los vecinos de Orusco, pero hay una ilusión real en ser alcalde de tu pueblo. 

"Hace un año estaba pensando en comprar un apartamento en la playa y estar viviendo seis meses en la playa y seis meses en Morata y, al final, van a ser los 12 meses en Morata"

P: Durante esas elecciones, 26 municipios cambiaron de manos. La mayoría fueron 'victorias' para el Partido Popular que fue el que consiguió quitar más ayuntamientos al PSOE. ¿Por qué cree que se dió esta dinámica?

R: Es la respuesta a una línea de trabajo. La forma de trabajar de Isabel nos ha llegado a todos. Y, además, está el tema de la gestión. Los cambios siempre son buenos. Y no voy a decir que siempre es bueno cuando es en nuestro favor. Cuando es de azul a rojo también lo es. Mi objetivo es estar aquí un tiempo y hacerlo lo mejor posible para facilitarle las cosas al que venga después. 

P: ¿Durante cuánto tiempo?

R: Ocho años es lo adecuado. Hace escasamente un año estaba pensando en comprar un apartamento en la playa y estar viviendo seis meses en la playa y seis meses en Morata y, al final, van a ser los 12 meses en Morata.

P: Dentro del PP de Madrid ha sido secretario ejecutivo de la Oficina Virtual. ¿Tienen mucha importancia para usted las redes sociales?

R: A mí me extrañaba siempre que, durante estos años pasados, hubiera compañeros que no estaban convencidos del uso de las redes sociales. Yo soy un friki de las redes sociales. Me he dedicado en el partido a atender a los ciudadanos e incentivar a los compañeros para que tuvieran las suyas. Me parece muy importante saber vender qué es lo que se hace, explicarlo y, sobre todo, contestar. Y, añado, contestar también a las críticas, porque para decirme lo bien que hago todo ya tengo a mi madre.

P: Como experto, ¿qué opina el ministro tuitero de Óscar Puente?

R: Como dice el refrán "que hablen de uno mal, pero que hablen". Aun así, todo tiene un límite y él es ministro. A mí me importa mucho el no pasarme.

"Tengo dos objetivos fundamentales: que Morata sea un pueblo seguro, con una Policía Local con su plantilla completada con servicio 24 horas, y, por otro lado, tener una escuela infantil"

P: Precisamente, en sus redes sociales he visto las actas del último pleno en el que había temas relacionados de gestión y una serie de mociones (del Partido Socialista y del Partido Popular) relacionados con la constitucionalidad de las instituciones. ¿No considera que los plenos de un Ayuntamiento como Morata tienen que ser cercanos al ciudadano?

R:Los vecinos tienen que tener voz y opinar de todo, no solamente del tema local. Aunque eso sea lo fundamental. A mi parecer, tienen que saber qué opina su representante sobre la amnistía, qué opinan sobre Cataluña o sobre la Constitución. A mí me parece adecuado. Además, hay mociones que son del Día de la Mujer o del Día del Niño, que tampoco son relativas exclusivamente de tu municipio, pero es adecuado tratarlas. 

P: Habla de que le gustaría estar ocho años al frente del Ayuntamiento. ¿Qué le gustaría para los primeros cuatro?

R: Los primeros cuatro años son para ponerse un poco al día y saber dónde estás. Mi primer objetivo es terminar las obras que estaban proyectadas. Finalizaban el 16 de junio, pero no ha sido así. Esto nos permitirá, además, recuperar la circulación de los autobuses que están desviados.

Luego tengo dos objetivos fundamentales: que Morata sea un pueblo seguro, con una Policía Local con su plantilla completada con servicio 24 horas. Y, por otro lado, tener una escuela infantil porque tenemos muchas familias jóvenes y las dos instalaciones que tenemos ahora son viejas y con problemas.

P: En cinco años, esperan llegar a los 10.000 habitantes y, para eso, hacen falta servicios y vivienda. ¿Cómo está ese tema?

R: Complicado. El problema es el suelo, todos los ayuntamientos están igual. La Comunidad de Madrid está verdaderamente preocupada en aligerar los trámites por parte de Urbanismo para que los ayuntamientos podamos reclasificar los suelos.

Ahora mismo, nuestra prioridad es ceder suelo para el Plan Vive y hacer un acuerdo a través de la Comunidad de Madrid. Queremos que la administración regional colabore con los municipios más pequeños para poder construir viviendas para jóvenes.

P: ¿Ve posible un plan VIVE en Morata de Tajuña?

R: Lo tenemos seguro para estos cuatro años.

"En un futuro, tendremos cámaras aéreas. Es muy importante que tengamos esos drones porque es la única manera de poder tener controlados ciertos sitios inaccesibles"

P: Muchos alcaldes que han pasado por aquí también nos han contado sus problemas con la seguidad y su idea de poner cámaras de videovigilancia. El debate sobre la privacidad ya no se contempla. 

R: Yo ya les he dicho a todos los vecinos que tenemos que ir muy guapos por la calle. El debate de la seguridad y la intimidad ya lo hemos dejado de lado. En Morata hemos tenido verdaderos problemas con unas cámaras que se instalaron se cumplir con las normas legales, ya lo hemos solucionado y la idea es poner más.

Hemos descubierto problemas en la piscina municipal sólo con estas 14 cámaras. La idea, en este año 2024, es doblar el número de cámaras instaladas por todo el municipio y también en los en los extrarradios. Y, en un futuro, tendremos cámaras aéreas. Es muy importante que tengamos esos drones porque es la única manera de poder tener controlados ciertos sitios inaccesibles.

P: Además, de la escuela infantil tienen proyectos para el instituto que el próximo curso será independiente y tendrá línea de bachillerato.

R: Hasta ahora eramos una sección del Instituto de San Martín de la Vega pero, con la bajada de ratios de la Comunidad de Madrid, pudimos cumplir los requisitos para ser independientes. Y, respecto a bachillerato, hasta ahora nuestros jóvenes se iban a Arganda del Rey, a Madrid, a Chinchón o a Villarejo de Salvanés.

Detrás de este cambio ha habido un trabajo tremendo de todas las corporaciones, de todas las AMPAS, los padres...Nuestro equipo de Gobierno sólo tiene que rematar ese trabajo tras 20 años. Los profesores y la nueva dirección han puesto todo de su mano para que este curso podamos tener aulas de bachillerato y, en un futuro, de formación profesional (FP). También hemos conseguido convencer a la Comunidad de Madrid para construirnos un edificio nuevo en el instituto.

P: Es imposible hablar de Morata de Tajuña y no pensar en las palmeritas de Morata. ¿Esa formación profesional puede ir enfocada por ahí?

R: La formación profesional será lo que demanden los padres, ni más ni menos. Bien es verdad que lo normal, lo lógico, sería el que hubiera una formación profesional en dedicada a la pastelería y a los obradores.

P: Y volviendo a estas palmeritas, no sé si hay alguna forma de regular o tienen algún proyecto en mente para diferenciar su producto. 

R: Hay que abrir el melón. Es el problema que tenemos siempre. Las palmeritas llevan 70 años. Ya lo han intentado los propios obradores y pastelerías. La idea es que se registre como marca, pero al ser productos artesanos es muy complicado.

Hemos iniciado las consultas para poder hacer una patente y una marca de 'producto de Morata'. Además, queremos que sea una marca que no solamente afecte a las palmeritas, también a los aceites, los ajos y nuestras bodegas. Lo que tenemos que hacer es proteger todos los productos. Las palmeritas son nuestra tarjeta de visita, pero una vez que ya llegas por las palmeritas, hay muchas más cosas.

"Es sorprendente que Morata no tenga una oficina de turismo. Es una injusticia absoluta que vamos a paliar en esta legislatura"

P: Ajos, vino, aceite... Los agricultores están movilizandose, imagino que también en su municipio, ¿Considera justas sus reivindicaciones?

R: Mucho han tardado. Me parece que el agricultor es un hombre paciente y sufridor, pero llega un momento dado en que te hartas y los entiendo perfectamente. Hay que escucharles y hay medidas que se pueden poner en marcha y no son tan difíciles. Como, por ejemplo, bajadas de impuestos, ayudas, supresiones de tasas, subvenciones... Yo haría mucho más, pero lo que están proponiendo sí lo puede hacer el Gobierno.

P: Este domingo empezaron los ensayos de La Pasión de Morata, como director de la misma. ¿Cómo van? ¿Cómo va a ser la siguiente edición?

R: Ya ensayamos todos los domingos hasta el Jueves Santo. La gente está contenta. Es un evento que llevamos 36 años y vuela solo. Tenemos el reconocimiento turístico de la Comunidad de Madrid y somos la única pasión con la bendición apostólica. Es una forma de que conozcan Morata. Cada año vienen 20.000 personas. 

P: Por cierto, ¿cómo va la oficina de turismo que prometió en campaña?

R: Es sorprendente que Morata no tenga una oficina de turismo. Es una injusticia absoluta que vamos a paliar en esta legislatura. La Oficina de Turismo va a estar instalada frente al Ayuntamiento y ya hemos hablado con la Dirección General de Turismo de Madrid porque ahora cada uno hace sus actividades por su lado y queremos unificar todo y que esté coordinado. 

P: Alcalde, estas semanas Morata se ha visto conmocionada por el triple crimen de sus vecinos. ¿Cómo está el pueblo? ¿Cómo lo ha sobrellevado?

A mí me da mucha pena porque no supimos ver el problema de estos vecinos. Como alcalde yo pienso que debería de haber estado un poco más atento. Alguno teníamos que haber dado la voz de alarma para intentar haber hecho algo. El pueblo está en shock todavía.

Lo único bueno, si se puede categorizar así, es que se ha recuperado un poquito ese espíritu que había antes de la pandemia de preocuparnos por el de al lado. Mucha gente se está dirigiendo al Ayuntamiento para unirse al grupo de voluntarios e ir a ver y llamar a esas personas que viven solas. También que vamos a firmar con Cruz Roja un convenio para el tema de la soledad no deseada. A veces, hay que aprender a base de estos golpes.

Tenemos que recuperar la costumbre de que si llevamos tres semanas ver a un vecino, hay que extrañarse y preocuparse. A veces los vecinos no se atreven, pues que nos avisen al Ayuntamiento.

P: Para que no les llamen cotillas.

R: En mi pueblo se dice gulismero. Por eso yo digo que nos avise y nosotros, desde Servicios Sociales, el Ayuntamiento, el propio alcalde, llamamos a esa casa. Además, a raíz de esto hemos hecho una charla a través de la Guardia Civil para mayores avisándolos de los riesgos de los fraudes, cómo utilizar las tarjetas de los bancos, el Bizum...

"Tenemos que recuperar que si llevamos tres semanas ver a un vecino, hay que extrañarse y preocuparse"

P: Esta tragedia ha sacado lo mejor de algunos vecinos, pero también lo peor. Tuvieron algunos incidentes con un comercio pakistaní de la localidad. 

R: A veces se tiende a generalizar. Resulta que el el agresor era pakistaní y tenía un locutorio en Arganda del Rey y en la localidad también tenemos un locutorio regentado por vecinos pakistaníes que son de Morata, porque llevan viviendo aquí 20 años. Y yo les veía muy preocupados porque todos los días tenían allí a la prensa. Por eso me pareció adecuado ir a verles y manifestarles el apoyo de todos los vecinos.