La Comunidad de Madrid empezará en agosto las pruebas de algunas de las funciones que forman parte de los nuevos equipos de teleasistencia avanzada para personas dependientes. Así lo ha comunicado Ana Dávila, consejera de Familia, Juventud y Asuntos Sociales de la Comunidad, en un desayuno informativo este jueves.

En total serán 400.000 novedosos equipos que integran mecanismos como la dispensación automática de medicamentos o la monitorización de la actividad en el domicilio a través de la Inteligencia Artificial.

Todo con la intención de beneficiar a las personas mayores o con discapacidad en situación de dependencia que viven en sus hogares, pero requieren de una supervisión en remoto. "Nuestro objetivo es prevenir los incidentes domésticos o que se produzca una deriva hacia la soledad", ha matizado Dávila.

El rendimiento de estos aparatos, como el mencionado dispensador, hace que se pueda llevar un seguimiento de los beneficiarios. "Funciona como dosificador", explica Dávila sobre este en concreto. "Proporciona cada pastilla a la hora a la que hay que tomarla. Actúa de tal manera que avisa a los sanitarios de posibles despistes cuando esta no sea tomada".

Lo mismo ocurre con el resto de aparatos como los que integran IA. "Se utilizará para recoger datos y parámetros a tener en cuenta sobre la vida cotidiana de los usuarios. Con ellos se hace un estudio y análisis para tomar decisiones en aspectos sociosanitarios".

La consejera ha apuntado que la cifra de personas atendidas con servicios de teleasistencia asciende a 76.000 en este momento, aunque pretenden alcanzar las 100.000. "Se trata de individualizar el modelo en base a las necesidades de cada persona".

Por esa razón, los dispositivos que obtendrá cada uno variarán en función de dichas urgencias. Lo mismo ocurre con los criterios empleados para adjudicar estos instrumentos, ya que tendrá prioridad "quien tenga menos recursos, más propensión al aislamiento o mayor dificultad para salir del domicilio", por ejemplo.

"Mejora en los servicios"

Las Consejerías de Asuntos Sociales y Digitalización están también trabajando conjuntamente en el desarrollo de una plataforma para explotar las opciones que ofrecen estos nuevos dispositivos y mejorar la coordinación con los servicios sanitarios. Además, también están creando un centro virtual para formar a los profesionales en cuidados de personas en situación de dependencia.

Dichos equipos contarán con nuevos perfiles profesionales como psicólogos, enfermeros, terapeutas y fisioterapeutas, para realizar valoraciones individualizadas, así como la intervención pertinente.

Dávila ha señalado que próximamente se aprobará una resolución que fijará los criterios de experiencia y formación que deben tener los asistentes personales para el acompañamiento de estas personas. En ella se contempla un mínimo de 150 horas de experiencia o 50 horas de formación para poder acreditarse y conseguir un certificado de profesionalidad específico.

La inversión será de 82,4 millones de euros para una teleasistencia que estará controlada por 450 profesionales y unidades móviles.

En general, manifiestan hacer una "mejora en los servicios". En materia de residencias también han querido trasladar esto incrementando las inspecciones de una anual obligatoria a dos al año en todos los centros.