Las calles de Majadahonda se modernizan con la instalación de 133 cámaras de inteligencia artificial (IA) para vigilar el municipio y una nueva Gran Vía más accesible.

La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Majadahonda ha aprobado el contrato de obras para el equipamiento y puesta en funcionamiento de un sistema inteligente y escalable de gestión de información de vídeo y 133 puntos para cámaras destinado a la seguridad, tráfico, movilidad y zona de bajas emisiones para la Policía Local de Majadahonda. Por otro lado, ha aprobado la solicitud de alta para la rehabilitación y mejora de la accesibilidad de la Gran Vía y su entorno, según ha informado el Consistorio majariego en un comunicado.

"Se da un paso más para que el municipio cuente con un avanzado sistema de seguridad para las calles de toda la localidad. Tras analizar las ofertas presentadas, se adjudicará y comenzará la fase de ejecución de las obras", informan desde el Ayuntamiento de Majadahonda.

A su vez, han destinado cerca de 4,7 millones de euros, financiados en un 95% con fondos de la Comunidad de Madrid, para reformar el principal eje peatonal de la ciudad, que cuenta con una problemática de accesibilidad general provocada por la tipología de parte del pavimento.

Majadahonda vigilada

Los 133 puntos destinados a cámaras de seguridad dotadas de IA, que se prevén en esta actuación, se suman a las apuestas por el refuerzo en seguridad que el gobierno de Lola Moreno está implementando en Majadahonda: 20 nuevos Policías Locales en las calles, 14 nuevos vehículos-patrulla con las últimas tecnologías aplicables, refuerzo de la unidad de drones, apuesta por la unidad medioambiental y el decidido control de la seguridad vial en las calles, entre otros.

"Majadahonda ya es una ciudad segura, pero con las nuevas medidas que se están adoptando esperamos llegar a unos niveles todavía mejores", asegura Antonio Rodríguez, concejal de Seguridad.

Una Gran Vía inaccesible

El solado actual de la Gran Vía de Majadahonda está constituido por adoquines con terminación en el denominado 'corte cantera'. La irregularidad de este tipo de pavimento es una característica que hace que no sea el idóneo para mayores o personas con movilidad reducida, por eso la aprobación de estas obras.

Por otra parte, existe una problemática en el túnel que discurre bajo la céntrica calle y parte de la plaza de los Jardinillos. Las pantallas de contención de tierras del túnel tienen la consideración de 'discontinuas' y están formadas por pilotes.

Esta solución técnica presenta como inconveniente que, si se producen entradas de agua, pueden producirse arrastres de material que produzcan oquedades que, a su vez, provoquen descuelgues en el pavimento en superficie con el riesgo asociado que todo ello acarrea. "Esta problemática es la que en la actualidad se viene produciendo puntualmente y la que requiere de inaplazable atención", opinan desde el organismo municipal.

"En el túnel se requiere un análisis y revisión estructural que permita garantizar la solución de problemas de servicio a medio y largo plazo. Por este motivo, se considera imprescindible que se realice una actuación única a los efectos de minimizar las afecciones", defiende Raúl Terrón, concejal Delegado de Urbanismo y Obras de Majadahonda.

El futuro de Rivas

En los últimos días, Majadahonda no ha sido el único municipio madrileño que ha definido cómo va a ser su ciudad en las próximas décadas. El Ayuntamiento de Rivas-Vaciamadrid también ha aprobado el documento que recoge el proyecto de Agenda Urbana, en el que se recogen todos los parámetros, las políticas y los proyectos estratégicos y motores.

El documento refrendado por el Pleno municipal promueve el diseño y la construcción de una ciudad más sostenible, compacta, inclusiva, segura y resiliente, en la que se refuercen un nuevo modelo económico y productivo y en la que se genere un empleo estable y de calidad.

Esta dimensión aglutina proyectos como la conexión de la M-50, el proyecto de cubrición del Metro o el Pacto Regional por la Cañada Real, nuevas redes de bus urbano o la consecución de la 'ciudad de los 15 minutos', Rivas como smart city, Cohabita Rivas, de vivienda colaborativa para personas mayores, la remodelación del Centro de Formación Municipal, la construcción de una gran infraestructura deportiva en el barrio de La Luna, de una nueva escuela de música y centros culturales.

La Agenda Urbana Rivas 2030 destaca por ser el resultado de un proceso participativo que tuvo lugar en la ciudad entre 2021 y 2022, y que bajo el título 'Rivas, párate a pensar' ha sido la base del diagnóstico y de muchas de las propuestas recogidas.