El centro de primera acogida para menores migrantes (menas) que se va a abrir en La Cantueña, Fuenlabrada, no tiene quien lo quiera.
Después de que lo hayan rechazado todos los partidos políticos, a excepción del Partido Popular (pues es la Comunidad de Madrid quien ha decidido levantarlo allí), Más Madrid se ha trasladado hasta Fuenlabrada para conocer las condiciones del espacio y pedir la paralización del proyecto.
Concretamente, su portavoz, Manuela Bergerot, ha calificado de "cárcel" el futuro edificio que acogerá a casi un centenar de jóvenes a partir de este mismo mes de septiembre.
La líder de Más Madrid en la región ha insistido en que es necesario otro modelo de integración de "estos niños y niñas" y, para ello, ha registrado una petición en la Asamblea de Madrid con el objetivo de paralizar el centro.
En declaraciones a los medios tras su visita, Bergerot ha comparado la Cantueña con el modelo del centro de Hortaleza que tanto critican sus compañeros de oposición, el grupo parlamentario Vox.
"Los macrocentros de Ayuso para estos niños son sinónimo de aislamiento y hacinamiento", ha denunciado, al tiempo que apostaba por residencias más 'humanas' en las que se garanticen su "derecho a la salud, el ocio, la participación y a la integración en sociedad".
En la iniciativa parlamentaria que han presentado en la Cámara Regional, Más Madrid replanteará desde cero el proyecto de La Cantueña apostando por un proyecto centrado en acoger a estos menores en espacios más humanizados.
A modo de ejemplo, Bergerot ha hablado de "familias de acogida, pisos tutelados o centros", siempre y cuando no superen las 20 plazas.
Bergerot ha asegurado que, con este tipo de instalaciones, "en un polígono industrial" y separados de la sociedad, la Comunidad de Madrid alimenta los "bulos" contra las personas migrantes. "Les estigmatiza y les pone en polígonos", ha finalizado.
Tres procesos judiciales
Además de esta iniciativa en la Asamblea de Madrid, hay tres procedimientos abiertos relativos al Centro de La Cantueña con los que el Ayuntamiento de Fuenlabrada espera clausurar el proyecto. Dos en juzgados ordinarios, uno referente a la paralización de la obra y otro por el tema de la reversión del suelo, y otro en el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM).
En los tres procesos, deben de ser los jueces los que tomen una decisión y, aunque en algunos de ellos se hayan estudiado medidas cautelares, en todos se ha permitido que sigan las obras de acondicionamiento del espacio. Precisamente, lo que quería parar Fuenlabrada.
"Sería el lamentable que se ponga en marcha el centro", destacan desde el equipo dela alcalde de Fuenlabrada, Javier Ayala, por el hecho de que la Comunidad todavía no se ha reunido con ellos. Denuncian que, pese a ser su Consistorio el que les atendería en temas relativos con los servicios sociales, "no sabemos cuándo ni cuántos menores" van a llegar. "Ni una reunión, ni un encuentro, ni una comunicación".
La falta de información por parte de la Comunidad de Madrid hace que el Ayuntamiento de Fuenlabrada se tema lo peor. De hecho, existen varias teorías en el Consistorio que apuntan a que el centro de Fuenlabrada se va a terminar convirtiendo en un refugio para los menores que están internos en el de Casa de Campo.
De un primer vistazo, esto sería complicado porque el centro de Fuenlabrada es para "primera instancia", es decir, una acogida inicial, y el de Casa de Campo tiene internos continuados.
Lo que sí es cierto es que la Comunidad de Madrid lleva años intentando cerrar este espacio y llevarse a los menores a otro lado. En un momento plantearon el municipio de Barajas, pero la medida no salió adelante.