"Lidl ya está realizando los estudios topográficos para implantarse en el PAU 5". Con este sencillo anuncio, el alcalde de Parla, Ramón Jurado, ratificaba esta semana el 'deshielo' de uno de los proyectos más ambiciosos y, a su vez, complejos que ha afrontado Parla en los últimos. 

Su gran polígono industrial, ahora renombrado como Parla Progresa, lleva más de 27 años intentando salir a flote. Un sinfín de complicaciones burocráticas y crisis financieras han ralentizado este proyecto que, por fin, verá la luz y cuyo primer 'ocupante' parece que será Lidl. 

Y es que, la compañía alemana instalará en un terreno de 145.600 metros cuadrados, tal y como se ratificó en la firma que el gigante de la alimentación y el Ayuntamiento protagonizaron en febrero de 2021. Se generarán, aproximadamente, 400 puestos de trabajo y, según las primeras estimaciones, podría estar activo en septiembre de 2025, como muy tarde. 

Una de las cosas más importantes de esa rúbrica a la que llegaron la empresa alemana y Ramón Jurado en 2021 es el compromiso de que la empresa recurrirá "a la bolsa municipal de empleo para cubrir centenares de puestos de trabajo". Tal y como anunció en su momento el propio alcalde. 

Bruno Garrido, concejal de Desarrollo Urbano e Industrial, Patrimonio Municipal y Obras Públicas del Ayuntamiento de Parla, explica a Madrid Total que las obras de este macrocentro logístico van a empezar "antes de finalizar el mes de febrero".

Lo primero que hay que hacer es "mover y ampliar una balsa de tormentas que protege a todo el barrio de La Laguna" y, a partir de ahí, desarrollar. El concejal asegura que es la gran obra que marca los tiempos de Lidl y que empieza con el movimiento de tierras de toda la parcela.

"Ellos ya tienen contratadas las obras y la empresa que va a gestionar toda la infraestructura del centro logístico. Quieren estar operando en Parla entre verano y septiembre de 2025", aclara. 

Sobre los detalles más técnicos, la nave y la parcela es la misma aunque, tal vez, puedan incrementar la capacidad de la misma porque están estudiando instalar silos de una forma diferente para aumentar su capacidad. "Como han hecho en su centro de Alcalá de Henares".  

Hay que recordar que este macropolígono industrial maldito se divide en varios sectores. Por un lado, está el UE1 de este PAU-5 de casi 5,78 millones de metros cuadrados, donde ya está el centro de innovación de John Deere, Decathlon, Híper Usera o Dreamfit.

Por el otro, el UE2 que se desarrollará a partir de ahora, con 3,8 millones de metros cuadrados, tendrá un uso preferente industrial y logístico y es donde estará Lidl. En esta zona ya se están urbanizando 650.000 metros para operadores logísticos principalmente, como es el caso del gigante alemán o Sonepar.

La historia del PAU 5

Durante unos veinte años, este polígono industrial situado junto a la A-42 ha tenido más de tres convenios urbanísticos. El último, en 2020, es con el que ahora están trabajando y es el que se ratificó en 2022 gracias a una ratificación de un convenio urbanístico entre el Ayuntamiento de Ramón Jurado y la Junta de Compensación.

En su plan de trabajo tienen las fechas pactadas: hay que desarrollar por completo la zona industrial entre 2022 y el 2030.

Para ello, el Ayuntamiento no para de dar pasos hacia delante, como es el caso de la conexión del polígono con la carretera M-419. Un ramal que supone un alivio para el acceso de la salida a la A-42 y que se aprobó en 2023.  

El propio alcalde de Parla explicaba en una entrevista a Madrid Total que uno de los grandes problemas que tenía este desarrollo era que muchas de las parcelas pertenecen a pequeños propietarios que no pueden hacerse cargo de la reparcelación y urbanización del polígono. Calles, aceras, acometidas de agua y luz... 

Para solventar esta situación, el Consistorio ha puesto en marcha un modelo de expropiación por convenio. De esta forma, el equipo de Ramón Jurado gestionará todo, como ya hizo con Parla Natura o Parla-Este, para que el desarrollo sea mucho más rápido.